Los badenes se han convertido en un quebradero de cabeza
para los conductores de Ceuta. Y es que, en muchos de ellos
ven cómo los bajos y las suspensiones de sus vehículos se
resienten. Desde la Plataforma Motera se vuelve a
reivindicar al Ayuntamiento que se tomen soluciones ya sobre
el asunto.
Los badenes se han convertido en un quebradero de cabeza
para los conductores de Ceuta. Y es que, en muchos de ellos,
ven cómo los bajos y las suspensiones de sus vehículos se
resienten, y, en algunas ocasiones, se rompen.
Desde Plataforma Motera se exige una solución: “Lo que
reivindicamos es que los badenes no cumplen con una
normativa legal. Exigimos al Ayuntamiento que se haga cargo
del asunto ya”, asegura el presidente de la Plataforma,
Enrique Rodríguez.
En Ceuta, aparte de la avenida de África, hay dos puntos
negros importantes que afectan a los conductores: en la
calle Méndez Núñez y en el cruce que se encuentra a 150
metros más arriba. Esto no afecta a los todoterrenos, pero
sí a los turismos de perfil bajo que sufren las
consecuencias de una mala construcción del badén en
cuestión. Según uno de los conductores, en “las calles
transversales de La Marina, tanto en las que suben como en
las que bajan, hay que tener muchísimo cuidado porque si no,
los bajos del coche se destrozan”. Tampoco la mayoría de los
perfiles de alcantarillado se adaptan al asfalto y provocan
muchos problemas a los vehículos de dos ruedas.
Por su parte, la Plataforma lleva denunciando de forma
reiterada que, según la normativa vigente publicada en el
BOE por el Ministerio de Fomento, con fecha de 23 de
septiembre de 2008, los reductores de velocidad tienen que
ser “una plataforma trapezoidal de 10 centímetros de altura,
construída en hormigón o material asfáltico, con un máximo
de 4 metros de largo y unas rampas de subida y bajada de
entre 1 y 2,5 metros, dependiendo del límite de velocidad
existente, siendo de 1 metro para límites de 30 km/h, de 1,5
metros para 40 km/h y de 2,5 metros para límites de 50 km/h.
Además, la Plataforma exige que “no se utilice pintura
bicolor (y deslizante) en los pasos de peatones con objeto
de cumplir con el artículo número 168 del Reglamento General
de Circulación”.
Muchas quejas de diferentes colectivos han llegado a la
Plataforma y seguimos se sigue sin ver “que se haga nada por
solucionarlo. Ya no sólo es por los conductores, sino
también por los peatones y por las personas con discapacidad
que se ven muy afectadas también por el problema de los
badenes”, concluye Rodríguez.
|