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La titulación de Técnico en Atención Sociosanitaria, creada
al calor de la Ley de Dependencia, sigue siendo la gran
desconocida por las administraciones públicas y empresas
privadas que prestan servicio a colectivos con necesidades
especiales, por lo que continúan sin ser considerada en sus
ofertas de empleo.
Cincuenta ceutíes que ya se han formado o están en periodo
de formación en el ciclo de grado medio para Técnicos en
Atención Sociosanitaria esperan aún que las administraciones
con competencias y las empresas privadas se acuerden de
ellos cuando haya que proveer un puesto de gobernante,
supervisor o responsable de planta dentro de una institución
residencial destinada al cuidado de personas con necesidades
específicas, tales como mayores, discapacitados,
convalecientes o crónicos de larga duración, o bien dentro
de sus programas de asistencia a domicilio.
Se trata de una titulación creada por el Real Decreto
1368/2007, al albur de la Ley de Dependencia, que sin
embargo no se ha hecho todavía lo suficientemente conocida
para que los organismos que gestionan esta demanda social la
consideren en sus ofertas de empleo.
Manuela López e Inmaculada Gil son dos de las ceutíes que
poseen esta titulación y que han vivido cómo instituciones
como Feaps han limitado sus ofertas de empleo a los
auxiliares de enfermería para cubrir plazas en pisos
tutelados. “El problema no está en Feaps, sino en las
administraciones que sólo dan subvenciones para contratar a
profesionales de esta categoría”, apuntan estas dos mujeres
formadas con la primera promoción del IES Almina.
Teóricamente, antes de 2015 todos los centros prestadores de
servicios para la autonomía y atención a la dependencia
deberán elaborar y desarrollar planes de formación para que
el conjunto de sus trabajadores estén cualificados
profesionalmente al efecto, considerándose tanto el título
de Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería como el de
Técnico en Atención Sociosanitaria. Sin embargo, los
segundos siguen esperando su oportunidad, al menos en Ceuta.
“Creíamos que se trataba de una profesión que tendría muchas
puertas abiertas con el desarrollo de la Ley de Dependencia.
Sin embargo, seguimos esperando porque continúa siendo una
gran desconocida”, dicen las afectadas.
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Un ciclo medio con dos mil horas de formación
La formación teórico-práctica en
Técnico de Atención Sociosanitaria consta de una serie de
contenidos que se agrupan en los siguientes módulos
profesionales: planificación y control de las
intervenciones; atención sanitaria; higiene; atención y
apoyo psicosocial; ocio y tiempo libre de colectivos
específicos; apoyo domiciliario; alimentación y nutrición
familiar; administración, gestión y comerciallización en la
pequeña empresa; necesidades físicas y psicosociales de
colectivos específicos; comunicación alternativa; relaciones
en el equipo de trabajo; y formación y orientación laboral.
De esta manera, estos profesionales serán capaces de
organizar, preparar y controlar las intervenciones de
atención a las personas y su entorno; desarrollar
intervenciones de atención física a personas con necesidades
específicas; desarrollar intervenciones de atención
psicosocial a personas con necesidades específicas;
desarrollar las actividades relacionadas con la gestión y
funcionamiento de la unidad convivencial; y realizar la
administración, gestión y comercialización en una pequeña
empresa o taller. Se trata de una formación de 2.000 horas y
para acceder a ella se ha de tener alguno de los siguientes
estudios: Educación Secundaria Obligatoria; Técnico o
Técnico Auxiliar; haber superado el segundo curso del
Bachillerato Unificado y Polivalente; otros estudios
equivalentes a efectos académicos. Otra forma consiste en
superar una prueba de acceso al ciclo formativo, debiendo
tener al menos diecisiete años.
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