Se abre el debate y una encuesta
realizada por Antena 3, sobre la cadena perpetua. En este
asunto, como en casi todos los que se tocan hay diversidad
de opiniones, pero según la encuesta realizada por la cadena
televisiva el 98% de los encuestados están a favor de la
cadena perpetua, sólo un 2% se expresan contrario a la
misma.
Si en la democracia, según dicen, prevalece lo que diga la
mayoría, la victoria del sí sobre el no es, realmente,
aplastante. Ese 2% que se muestra contrario a la misma, sin
duda alguna, son esos que siempre son tan “buenos”.
Algo está fallando en el sistema, cuando somos uno de los
países que más cárceles tenemos y más delincuentes están
dentro de ellas. Y si algo falla, lógicamente, se deberán
tomar las medidas necesarias para evitarlo.
No es de recibo que un fulano, terrorista, asesino de
veinticinco personas se encuentre, en estos momentos, en
libertad, sin haber cumplido ni tan siquiera un año por cada
muerte realizada de personas inocentes.
El Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, ha pedido
la reforma de la Ley del Menor y, en concreto, del régimen
de libertad vigilada. Esta petición se produce con la cuarta
detención de “El Rafita” uno de los asesinos de Sandra Palo
que se haya en libertad vigilada.
Cuando “El Rafita” que es un peligro público cometió el
asesinato de Sandra Palo era menor de edad y, por tanto,
tenia que ir a un reformatorio de donde, al parecer, por sus
acciones su reinserción es poco posible.
No se entiende como violadores salen de la cárcel y vuelven
a cometer violaciones, una y otra vez, en cada ocasión en
que son puestos en libertad, aunque está sea libertad
vigilada. Ni que el asesino confeso de Marta del Castillo se
niegue a decir dónde está el cuerpo de la joven. Ni, por
supuesto, que algunos de los que, al parecer, le prestaron
ayuda estén en libertad.
La cadena perpetua, impuesta a estos asesinos, cuando pasen
unos años en prisión, se les podría hacer una revisión de
sus casos y si, en realidad, muestran algún arrepentimiento
de los crímenes cometidos y esas pruebas realizada por un
grupo de expertos, consideran que se pueden reinsertar en la
sociedad, se les pone en libertad vigilada.
Si por el contrario, como existen muchos casos, en los que
estos asesinos, no sienten arrepentimiento alguno, es más se
mofan de la autoridades en los juicios y hasta se sienten
orgullosos de los crímenes cometidos contra victimas
inocentes pues que se pudran en las cárceles, cumpliendo esa
cadena perpetua a las que se les condenó Punto pelota.
Qué la Ley del Menor hay que revisarla y ajustarla a los
tiempos en que vivimos, es una verdad como un templo, pues
un chaval con 16 años hoy día, no es lo mismo que hace años
uno con esa misma edad.
La pena es que, a estas alturas de la vida, el pueblo
español de forma mayoritaria vote por la cadena perpetua.
Algo está fallando en el sistema.
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