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Los funcionarios del Juzgado de Instrucción número 3 de
Ceuta se encontraron ayer con una desagradable sorpresa:
expedientes mojados, oficinas encharcadas y cajones
completamente inundados. Aunque no sea la primera vez que
les ocurre, como en otras delegaciones de justicia de Ceuta,
esta vez no previeron el temporal del fin de semana y no
colocaron los ‘tradicionales’ plásticos para cubrir el
mobiliario de la oficina. Los sindicatos aseguran estar
“hartos” de la situación: “No se aportan soluciones. Son
pequeñas ‘chapuzas’ que no llevan a nada y que no sirven
para arreglar el problema”.
Los funcionarios del Juzgado de Instrucción número 3 situado
en la calle Serrano Orive de Ceuta se encontraron ayer por
la mañana con una desagradable sorpresa: expedientes
mojados, oficinas encharcadas y cajones completamente
inundados. Pero no es la primera vez que el edificio se
despierta con goteras y, si no se soluciona el problema,
tampoco será la última. Los otros dos afectados han sido el
Juzgado de Instrucción número 2 y el Juzgado de Menores.
Y es que ayer, uno de los despachos tenía “hasta un dedo de
agua”, afirma uno de los representantes de UGT, Juan Miguel
Cubo. “Desde hace tres o cuatro años se quedó mal construido
a pesar de las supuestas reformas que se han llevado a
cabo”. El techo que cubre la segunda planta del Juzgado es
la terraza del inmueble, que “tiene el suelo mal construido
y las goteras son insoportables”, continúa Cubo.
Durante el fin de semana el temporal ha provocado que el
mobiliario de la oficina se empapara, pero lo más
preocupante es que los expedientes y todos los informes que
se encuentran en el lugar se hayan mojado también: “El
problema principal ha sido el de los expedientes, ya que es
increíble que los funcionarios hayan tenido que estar toda
la mañana secándolos”, continúa el representante de UGT.
Por otra parte, el agua supone un riesgo muy elevado para
los trabajadores ya que podría causar algún cortocircuito a
la hora de enceder las máquinas para trabajar: “Han tenido
que secar con trapos absolutamente todo. El suelo de parquet
está negro y las fregonas han sido el instrumento con el que
más se ha trabajado”, afirma resignado Cubo.
Otro de los problemas es que, al ser un organismo público,
“evidentemente no puede cerrarse y toda la gente que ha
venido se ha quedado sorprendida”. A pesar de las continuas
quejas y de los escritos que se realizan cada vez que
sucede, “no se aportan soluciones. Son pequeñas ‘chapuzas’
que no llevan a nada y que no sirven para arreglar el
verdadero problema”, finaliza el representante de UGT.
Por su parte, el delegado de justicia de CCOO, Damián
Martín, también asegura que desde el sindicato están “hartos
de denunciar este tipo de incidencias. Las oficinas no
reúnen las condiciones necesarias para que los funcionarios
puedan realizar su trabajo de forma correcta”. Y es que,
“durante los fines de semana que se sabe que va a llover, se
ponen plásticos sobre el mobiliario de la oficina. Pero esta
vez ha pillado por sorpresa a todos”.
Instalaciones precarias, tecnologías anticuadas y todo ello
unido a una sobrecarga de trabajo, provoca que los jueces,
secretarios judiciales y funcionarios padezcan los males de
una situación que debería haberse solucionado ya hace mucho
tiempo. Además, la enorme dispersión de las sedes y la falta
de medios materiales, han provocado un enorme descontento en
todo el sector. Los sindicatos piden otra vez, que se
solucione ya y se lleve a cabo ya el plan de construcción
del próximo Palacio de Justicia.
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Septiembre de 2008: el comienzo de los problemas
de las humedades... y de las quejas
El Juzgado de Instrucción número 3
no ha sido el único que ha sufrido filtraciones de agua y,
por lo tanto, problemas de humedad en sus instalaciones.
Allá por septiembre de 2008, en el Juzgado de Menores, CCOO
puso en conocimiento que había un acceso de agua por uno de
los ventanales, llegando incluso a correr riesgo para los
trabajadores ya que existía una toma de corriente cercana a
donde se producían las filtraciones. El Juzgado de
Instrucción número 2 también ha sufrido los estragos de los
temporales de Ceuta en este último año. Pero a día de hoy,
el problema sigue exitiendo y las instalaciones siguen
siendo nefastas. El sindicato, en un informe redactado ayer,
muestra de forma clara y concisa las diferencias apreciables
en el Juzgado desde hace un año y medio. En las fotografías
se observa un claro deterioro de las instalaciones y de todo
el mobiliario de la oficina y los papeles colgados y
secándose por los tablones. Todas las supuestas reformas,
según el sindicato, han sido en vano.
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DENUNCIA SINDICAL
