Socorrer a las víctimas, rescatar personas en los
escombros, desplegar hospitales de campaña e informar como
responsable de comunicación de Cruz Roja Española sobre lo
que allí acontece será la misión de Germinal Castillo,
responsable de dicha área en Ceuta, que ha partido hacia
Haití a primeras horas de esta mañana. Pese a ser realista y
saber que “el infierno será un lujo comparado con lo que nos
encontremos allí”, Castillo no contempla el miedo puesto que
su objetivo es “relatar todo lo ocurre porque lo que no se
narra no existe en esta sociedad de la información”,
aseguró.
Pregunta.- Panorama desolador pero Cruz Roja Española
siempre dispuesta y más, en emergencias, ¿no?
Respuesta.- La Unidad de Comunicación de Emergencias de Cruz
Roja es una red que se establece para atender situaciones de
este tipo y funciona en todos los ámbitos (comunicación,
telecomunicaciones, saneamiento, logística, agua, sanidad).
Todo lo que puede conllevar la reconstrucción o el abordaje
de una catástrofe, con compañeros capaces de movilizarse en
24 ó 48 horas, con perfiles elegidos desde la Asamblea.
P.- ¿Cuáles creen que han sido las cualidades por las que
le envían desde Ceuta?
R.- En mi caso, por la experiencia en comunicación, tanto en
Cruz Roja como en otros sitios, y otros requisitos como el
conocimiento de francés, sanitario o emergencias.
Probablemente, yo seré el delegado tanto de España como de
Europa.
P.- ¿Cómo se enfrentará Cruz Roja Española a esta
catástrofe acontecida en Haití?
R.- Socorrer a las víctimas desde dos vertientes: atender a
los vivos y, desgraciadamente, enterrar a los muertos,
evitar las epidemias y rescatar a quienes estén debajo de
los escombros. De forma paralela, montar hospitales de
campaña, dar a la gente agua potable y refugio, teniendo en
cuenta que se trata de un país en el que ahora mismo no hay
nada.
P.- A nivel personal, ¿se ha lanzado alguna vez a
experiencias como estas?
R.- Con Cruz Roja sí, y como periodista, no tan extremas,
aunque estuve en el Sáhara y he hecho reportajes más o menos
complicados, pero no de este tipo. Evidentemente, mi
objetivo no puede ser otro que no sea el de ayudar, el ánimo
de alguien que trabaja en Cruz Roja. Comunicar quizás sea
algo que no se entienda como ayuda pero a mí me parece
fundamental porque debemos contar no sólo lo que se está
haciendo sino cómo está la situación allí. Hay que contar
que hay gente que no tiene nada, que hay padres que se han
quedado sin hijos e hijos que se han quedado sin padres, que
la situación es dantesco, que los recursos mínimos y básicos
no existen, y hay que contar que habrá gente que se va a
morir de no comer o de no de beber. Y hay que narrarlo
porque vivimos en una sociedad de la información y todo lo
que no se cuenta, no existe. Además de ayudar porque mi
labor será en todos los campos.
P.- ¿Miedos, temores, inseguridad?
R.- El infierno será un lujo comparado con lo que nos
encontremos allí pero no me da miedo y no contemplo el no
regresar. Si tuviera miedo, no iría, y llevamos cierta
protección. Aunque es algo que no me preocupa, ni he
pensado.
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