Mediador inesperado entre UDCE y PSOE, el ex secretario de
Organización de los socialistas ceutíes Juan Carlos Llodra
fue el artífice de que, pese a sus reticencias iniciales,
los secretarios generales de ambos partidos se sentaran a la
misma mesa para dialogar a finales de noviembre. Mes y medio
después, con las negociaciones rotas, el que también fuera
miembro en el pasado de Nueva Izquierda y de Izquierda Unida
avisa a ambas partes: “Tienen el mandato ciudadano de
entenderse”.
Juan Carlos Llodra asistió en persona el pasado martes a la
rueda de prensa en la que el presidente de UDCE, Mohamed
Ali, arremetió contra el PSOE de Ceuta caliente como una
plancha tras enterarse del SMS que Carracao había enviado a
parte de su militancia y a otras personas “de relevancia
social” imputando a los localistas la responsabilidad de la
ruptura de sus conversaciones para acabar integrándose en
las filas socialistas.
Entre los periodistas el que fuera secretario de
Organización de los socialistas ceutíes en los ochenta
asistió en persona a cómo Ali vulneraba lo que Javier
Solana, recuerda Llodra al periodista, considera la segunda
regla de cualquier negociación: “Él dice que lo primero es
creer que es posible llegar a un acuerdo; lo segundo,
procurar que ninguna parte diga públicamente que no lo es, y
yo estoy de acuerdo”, explica.
El que también fuera dirigente de IU y militante de Nueva
Izquierda, el grupo liderado por López Garrido que acabó
integrándose en el PSOE no pierde, desde esa postura
posibilista que mantiene, la esperanza, que desde su punto
de vista es una obligación, de que los dos principales
partidos de la oposición se pongan de acuerdo.
“En las autonómicas sumaron 7.500 votos y en las generales,
sin que UDCE se movilizase plenamente, rozaron los 15.000”,
recuerda Llodra en lo que interpreta como “un claro mandato
ciudadano para entenderse”.
“UDCE ha sido muy generosa en estas conversaciones,
aceptando disolverse y ceder el primer puesto de la
candidatura de 2011 al PSOE, que también lo fue en sus
planteamientos, pero al final todo se rompió por unos
flecos”, recuerda Llodra.
Flecos o, como también los llama, “pecados de juventud”, la
expresión que utiliza para referirse al SMS de Carracao y a
las acusaciones de “racista” que Ali dirigió después al PSOE
Regional. “Respeto los comentarios de ambos, pero considero
que por el bien de esta ciudad ambos deberían recapacitar y,
en público o en privado, pedirse excusas mutuamente”, opina
Llodra, para quien “el único partido que ha hecho cosas para
merecerse calificativos como los que vertió Ali es el PP,
que se negó a retirar un premio a una agrupación que sí
profirió acusaciones racistas”.
“En la calle se percibe que hay muchos ceutíes deseando una
alternativa al PP, que están tan cansados de su Gobierno
como de las divisiones en la izquierda ceutí, y ni UDCE ni
el PSOE pueden ser ajenos a la expectativa ilusionante que
sus conversaciones despertaron en muchos sectores de esta
sociedad”, opina antes de insistir en que “las fracturas
internas de los Populares hacen que aún sea más necesario y
oportuno que nunca plantear ahora un proyecto alternativo
serio de cara a los próximos comicios”.
“Esta es la ocasión de la izquierda”, concluye Llodra, que
tampoco cree que el PSPC deba quedar vetado en el proyecto
“si personas como su secretario general, Iván Chaves,
entienden lo que significa participar de un partido con
funcionamiento federal”. “Creo que se pensó que era más
fácil empezar el diálogo entre los dos partidos más
representativos, pero nadie vetó a quien sepa diferenciar lo
que es estar en un sitio y estar en otro”, considera.
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Ali rehúsa prolongar el debate con los socialistas
“Pasamos página y nada más”. El
líder de UDCE se negó ayer a preguntas de los periodistas a
mantener su intercambio público de impresiones con el PSOE
alrededor de la ruptura de sus conversaciones. “Se está
creando un debate que no es el original y que no beneficia
ni a nuestros partidos ni a la ciudadanía”, opinó Mohamed
Ali, que se negó a “priorizar las opiniones sobre quién
miente y quién no”. “Siempre estaremos dispuestos a
consolidar cualquier alternativa progresista en esta ciudad,
pero no es oportuno seguir extendiendo este debate”, apuntó
antes de pronunciarse también a favor de seguir “colaborando
y coordinándose” con el Grupo Parlamentario Socialista en la
Asamblea “cada vez que sea posible y beneficioso para los
ceutíes”. Preguntado por si rectificaba sus declaraciones
del martes dijo: “Yo no he dicho lo contrario”.
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