PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - MIÉRCOLES, 6 DE ENERO DE 2010

 

OPINIÓN / MIS COSAS

Mis cosas
 


ADE
ade
@elpueblodeceuta.com
 

Con la cabalgata de los Reyes Magos, se pone punto final a todas las fiestas que hemos venido celebrando. Una fiesta, esta de los Magos de Oriente, llena de ilusión.

Ilusión de pequeños y mayores porque, no les quepa la menor duda, a algunos mayores también le lleva la ilusión y les hace recordar tiempos pasados, donde fueron niños, y la noche de la víspera de Reyes, apenas si podían pegar ojo, deseando que amaneciera para ver qué le habían traído los Magos de Oriente.

Un año más volverá a repetirse la cabalgata de la ilusión y para que no falte de nada muchos ceutíes, que como las meiga haberlos haylos, llevaban hasta el correspondiente paraguas, abriéndolo al paso de sus majestades, para coger caramelos.

No se quién sería el que pondría de moda el asunto de los paraguas, pero lo que si se, porque estoy seguro de ello, por las experiencias vividas durante años atrás de que esos “paraguas” no faltaron a la cita de la cabalgata.

Desde hace días, menos aquellos que todo lo dejan para última hora, los comercios se han visto con clientela, comprando los correspondientes regalos.

Y aquí, en los momentos en los que se acercan los Reyes Magos, habría que grita, como si uno fuese Mazigen Z ¡¡Carteras fueras, Visas en la mano!!. Porque hasta las Visas, esos cartoncitos que te da tu banco amigo, en el supuesto que alguno tenga amistad con un banco, terminarán echando humo.

Luego, después de la alegría por los regalos recibidos, vendrá la cuesta de enero y el cartoncito no se podrá usar, porque está más seco que un volao con poniente fuerte. No nos queda más remido, que tirar como se pueda hasta ir reponiéndonos un poco, y el cartoncito, que nos dio nuestro banco amigo, vuelva a poder funcionar prestándonos algo de metálico.

En fin, queridos míos, que como esto pasa todos los años, no nos puede coger de sorpresa, aunque el año pasado hayamos hecho propósito de enmienda y no estira el cartoncito al máximo. Un propósito que volveremos a hacer el para el próximo año pero que, una vez más, no cumpliremos.

Presten mucha atención a la hora de comprar algún artefacto que necesitan pilas para poder ponerse en marcha. No dejen de comprar las pilas, para a primeras horas de hoy, tener que salir corriendo a ver dónde encuentra las dichosas pilas, para el muñeco de la niña, que sin las pilas ni llora, ni hace pucheros, ni nada.

Este consejo no lo olviden, es muy importante para evitar ciertos enfados familiares, por unas pilas de nada. La experiencia, en estos asuntos, me ha llevado a darles este consejo, que es lo único que no cobro o sea que es gratis. No me negarán que es un detalle por mi parte.

Y para rematar la faena del día de reyes, hay que comprar el consiguiente rosco que, por supuesto, nos traerá en un su interior una sorpresa, casi siempre una figurita de nada, pero que te hace una gran ilusión.

Ahora que para sorpresa, lo que se dice sorpresa, la que nos va a dar el banco cuando nos cargue el gasto de la tarjetita.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto