Los últimos meses del año han supuesto un refuerzo de las
expectativas de desarrollo del Puerto de Ceuta por parte de
las principales instituciones de la ciudad y del Estado. El
pasado mes de noviembre, con motivo de su visita a la
ciudad, el ministro de Fomento, José Blanco, señalaba en una
entrevista concedida al El Pueblo que el puerto ceutí “puede
tener su sitio en el área logística del Estrecho”. En cuanto
a la presencia en su zona de influencia de puertos como el
de Algeciras y el Tánger-Med, el responsable de Fomento
indicaba que “algunas veces hablamos competencia como de un
mal que nos sobreviene y del que tenemos que defendernos,
cuando en muchas ocasiones son oportunidades que se nos
presentan”. A su modo de ver, “el disponer de un gran puerto
en Algeciras y en un futuro muy corto, de otro gran puerto
en esta costa, como es el de Tánger podría constituir más
una oportunidad de colaboración que una competencia”.
Uno de los anuncios de esta visita institucional fue el de
la próxima entrega a la Ciudad de los primeros resultados
del estudio sobre las líneas estratégicas para el Puerto y
que tiene como finalidad “revisar la integración entre el
puerto y la ciudad y lograr un mejor aprovechamiento del
suelo portuario en beneficio de esta”. El impulso a este
trabajo corresponde de forma conjunta, subrayó, a la Ciudad,
la Autoridad Portuaria y Puertos del Estado.
Por su parte, en los balances del año publicados también por
este diario tanto del delegado del Gobierno, José Fernández
Chacón, como del presidente de la Ciudad, Juan Jesús Vivas,
ambos se referían al Puerto como uno de los yacimientos de
desarrollo económico y de empleo más potentes de Ceuta.
El presidente de la Autoridad Portuaria, José Francisco
Torrado, subrayaba ayer de hecho el “consenso” existente
entre las administraciones públicas a la hora de diseñar las
estrategias para el puerto de Ceuta.
Entre los frutos de estos últimos años, Torrado destacó el
“importante” crecimiento en el número de escalas de
bunkering (avituallamiento de combustible a buques), con
unas 40.000 anuales al margen de los ferries, además de la
suma de nuevas inversiones como las de Cepsa, Bominflot y
Ducar y el incremento de las empresas consignatarias.
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