Durante los últimos días de este mes, las Brigadas
Forestales se organizaron para erradicar las plagas de
procesionaria del pino instaladas en diferentes zonas de
Ceuta, tales como Benzú, el monte de Aranguren y los
pantanos. La segunda y última fase de exterminio tendrá
lugar durante la primera semana de enero, en la que los
operarios volverán a actuar directamente sobre los nidos del
molesto insecto.
Tras realizarse una primera fase de exterminio de la plaga
de la procesionaria del pino, durante los últimos días del
mes de diciembre, en diversas zonas de Ceuta, tales como
Benzú, monte de Aranguren o los pantanos, las Brigadas
Forestales tienen previsto iniciar una segunda fase a
primeros del año que entra.
Durante esta etapa inicial de erradicación, varias patrullas
se distribuyeron por las zonas afectadas actuando contra los
nidos de la procesionaria mediante disparos.
Según explicó el jefe de las Brigadas, Carmelo Navarro, a
pesar de las intensas precipitaciones producidas durante las
últimas semanas en la ciudad, este ha sido un invierno
cálido en general, por lo que las plagas se han reproducido
en menor medida, disminuyendo en un tercio los nidos
encontrados en nuestros montes respecto de otros años.
El daño principal que provoca este insecto es la defoliación
de los pinos, es decir, la pérdida de las hojas, pues todas
las fases larvarias se alimentan de acículas, las larvas más
pequeñas de los brotes tiernos y las demás de cualquier
parte verde. Los daños pueden ir desde árboles salpicados de
manchas amarillentas semi-secas hasta la caída completa de
las acículas.
La procesionaria del pino tiene un comportamiento gregario,
creando nidos de seda,viviendo en colonias y moviéndose en
grupos. Es precisamente su curiosa manera de desplazarse lo
que le dio nombre, ya que siempre van en fila india, unas
detrás de otras formando una larga procesión que sigue a la
primera oruga allí donde vaya.
Su capacidad de adaptación a diferentes condiciones
ambientales, hacen que se instalen en todas las variedades
del pino, uno de los árboles más comunes en los parques y
campos de la ciudad.
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