La ilusión lo puede todo. O casi todo, al menos en política.
Las conversaciones que UDCE y PSOE mantienen desde hace
semanas, dadas a conocer públicamente hace quince días, no
han llegado todavía a buen puerto. Tanto es así que el
primer grupo de la oposición ha postergado la Asamblea que
tenía previsto celebrar el próximo 8 de enero hasta finales
de mes. El partido de Mohamed Ali no someterá a sus bases
formalmente la posibilidad de disolverse para integrarse en
el PSOE sin siglas hasta que el partido que lidera José
Antonio Carracao concrete su ‘hoja de ruta’ para llegar a
tal fin.
UDCE no planteará a sus bases la posibilidad de disolverse y
fusionarse, sin siglas, en el PSOE, hasta que la Ejecutiva
Regional que comanda José Antonio Carracao no concrete una
propuesta firme de una ‘hoja de ruta’ para completar el
camino que permita a los de Mohamed Ali dar tal paso y poner
fin a la vida activa de un partido que fue inscrito en el
registro de partidos políticos del Ministerio del Interior
el 4 de septiembre de 2002 y que se ha erigido en el primer
grupo de la oposición en la Asamblea tras los dos comicios
autonómicos a los que ha concurrido, los de 2003 y 2007, en
este último caso en coalición con IU.
Precisamente en la Cámara autonómica está uno de los puntos
que los interlocutores que están llevando las conversaciones
entre los dos partidos aún no han plasmado en el documento
que debe regir los pasos a dar para llegar a ser uno solo.
UDCE desea que en dicho texto quede claro que Mohamed Ali
sería el portavoz del nuevo Grupo Parlamentario Socialista
que, con cinco diputados, ambas formaciones son partidarias
de constituir aprovechando la reforma en ciernes del
Reglamento de la Cámara que obligará a emprender el recurso
presentado por el diputado no adscrito de IU, Mohamed Haddu
Musa, amparándose en una sentencia del Constitucional sobre
el ejercicio de los derechos políticos de los electos.
Según han confirmado fuentes de ambos partidos y del propio
PP el grupo mayoritario en la Asamblea no parece que vaya a
poner demasiados obstáculos a la hora de redactar un
articulado que facilite la fusión de los que ahora lideran
Mohamed Ali e Inmaculada Ramírez.
Los Populares son, según reconocen fuentes autorizadas de la
formación que lidera Vivas, partidarios de que los dos
grandes partidos de implantación nacional sean también
“fuertes” en la ciudad autónoma. De paso se ahorrarían que
una oposición unida dispusiese de dos turnos en el uso de la
palabra para rebatir sus posiciones, aunque ni UDCE ni PSOE
creen que disponer de ellos sea mejor que visualizar en los
Plenos su unidad.
Ninguna de las partes, de acuerdo con la versión de las
fuentes consultadas, se negaría a que la portavocía fuese
alterna o compartida para que la actual portavoz socialista
siga ejerciendo como tal en determinadas sesiones o sobre
ciertos temas.
Se trata de un escollo, pues, aparentemente fácil de superar
que, sin embargo, no aparecía plasmado textualmente en el
articulado de propuestas e intenciones que Carracao ha
trasladado a UDCE.
Los socialistas tampoco han concretado hasta la fecha si
asumirían acordar un reparto en cremallera de la lista
electoral. El planteamiento del PSOE de Ceuta pasaba
inicialmente porque su secretario general, José Antonio
Carracao, liderase la lista a las autonómicas que
previsiblemente se celebrarán en mayo de 2011. Que el número
dos lo ocupase Mohamed Ali y que a partir de tal puesto se
distribuyese de forma alterna de dos en dos. UDCE apuesta
porque el reparto de candidatos sea individual desde el
principio.
No hay pegas ni disputas, ni por uno ni por otro lado, en lo
que a las responsabilidades que actuales militantes y
dirigentes de UDCE asumirían, en calidad de delegados, ya
que los Estatutos del partido establecen que el número de
Secretarías esablecido en la Asamblea Constituyente no se
puede modificar posteriormente, en la Ejecutiva Regional.
“Visualización” institucional
Lo del Comité Regional, que en ningún caso se remozará para
que se reparta de forma equitativa dando cabida a antiguos
afiliados de UDCE, es un asunto menor que tampoco preocupa a
ninguna de las partes. Sí lo hace, a UDCE, la aparente
dificultad existente para que alguno de sus integrantes
pueda ocupar un puesto institucional en alguno de los
distintos departamentos que coordina la Administración
General del Estado, en manos socialistas, en Ceuta.
El grupo de Mohamed Ali desea “visualizar” en esta
institución, tal y como las dos partes están de acuerdo en
hacer en la Asamblea, la “nueva situación política” que
depararía la desaparición de UDCE para participar de un
proyecto común en el partido de la rosa, pero en ningún caso
sustituyendo al responsable de Sanidad Exterior, Manuel
Tenorio. El delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, no
parece estar sin embargo por la labor de facilitar dar
satisfacción a esa solicitud, que el probable paso de la
actual directora de la UPD al CETI, ni mucho menos aparcado
según fuentes de toda solvencia, facilitaría poder cumplir.
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