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En numerosas ocasiones he
manifiesto a través de mis humildes reflexiones las
diferentes cualidades que reúne nuestro Presidente en el
desarrollo de las labores encomendadas por la mayoría de los
ceutíes en los dos últimos comicios autonómicos celebrados.
Por tanto, es de justicia reconocérselas ya que, estas han
conseguido, entre otras cuestiones, sosegar la vida política
en una Asamblea habituada años atrás a los enfrentamientos
entre los inquilinos de sus escaños así como, normalizar las
relaciones institucionales con la representación en nuestra
ciudad del Gobierno de la nación.
No obstante, también es de justicia reconocer el co-protagonismo
asumido por José Fernández Chacón, Delegado del Gobierno así
como, por su Jefe de Gabinete, Sergio Moreno en la
reciprocidad de la tan deseada lealtad institucional entre
ambas administraciones, moderando considerablemente los
ánimos de sus correligionarios. Labor, que ha propiciado el
establecimiento de unas relaciones fluidas que han
fructíferado en importantes acuerdos que han beneficiado
satisfactoriamente a todos los ceutíes.
Resultado evidente de estas excelentes relaciones ha sido la
declaración final elaborada de la Conferencia de presidentes
celebrada días atrás en relación a los objetivos aprobados
para la próxima presidencia española de la Unión Europea
entre los cuales se recoge la histórica reivindicación de
Ceuta y Melilla de contar con un tratamiento específico
argumentado en nuestros condicionantes; nuestra
extrapeninsularidad, escasez de suelo, agua, energía y otros
recursos básicos, el hecho fronterizo, la alta densidad de
población y nuestra reducida superficie. Propuesta que ha
recibido el apoyo unánime tanto del Gobierno central como de
los autonómicos significando un relevante avance en las
aspiraciones de la Ciudad. Una vez más queda demostrado, que
cuando se actúa desde la responsabilidad y el razonamiento
apelando a la solidaridad de todos no se encuentra ningún
tipo de rechazo.
Ahora, corresponderá al Ejecutivo socialista afrontar la
Presidencia de la Unión Europea con la mente puesta en el
objetivo final de convencer a todos los estados miembros de
la Unión Europea en relación al reconocimiento de todas las
especificidades recogidas en el documento señalado,
equiparando a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla con
las regiones ultraperiféricas reconocidas por la propia
Unión Europea.
Una vez alcanzado este objetivo será el momento oportuno de
conseguir el próximo objetivo, la reforma de nuestro Régimen
Económico y Fiscal en base al documento presentado por el
Ejecutivo de la Ciudad dando cumplimiento con ello a lo
previsto en la Disposición Adicional 2ª de los Estatutos de
Autonomía de Ceuta y Melilla, donde se establece, en ambos
casos, el mandato de actualizar y garantizar, mediante Ley
del Estado, las peculiaridades del Régimen Económico y
Fiscal Especial que rige en las dos ciudades.
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OPINIÓN / AL SUR DEL SUR
