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Las consejerías de Gobernación y Economía han llegado a un
acuerdo con los representantes del sector del taxi local
para eliminar el requisito que establecía que para recibir
subvenciones para renovar la flota tuviera que enviarse al
desguace el vehículo a retirar. La Ciudad destinará 200.000
euros a este programa en 2010.
Los taxistas ceutíes podrán acogerse al plan de renovación
de la flota que pondrá en marcha con una programación
trianual a partir de 2010 la Ciudad Autónoma sin tener que
enviar al desguace el vehículo a retirar, tal y como había
establecido inicialmente el Gobierno local.
Así lo acordaron los representantes de las dos cooperativas
del sector, Auto Taxi y Radio Taxi, con los consejeros de
Economía y Empleo, Guillermo Martínez, y Gobernación, José
Antonio Rodríguez, en su última reunión para consensuar la
reglamentación del programa de ayudas, presupuestado en
200.000 euros para cada una de las tres próximas
anualidades.
“Hemos entendido”, explicó ayer Martínez en declaraciones a
este periódico, “que siempre y cuando cumplan todos los
requisitos para seguir circulando no existe ningún
inconveniente en suprimir ese requisito mientras los
automóviles a renovar dejen efectivamente de prestar
servicio público”.
De esta forma los taxistas podrán seguir utilizando los
vehículos que renueven como sus coches particulares,
venderlos o cederlos.
En ese encuentro los dos consejeros trasladaron también al
sector su disposición a aumentar la consignación
presupuestaria total del programa, que asciende a 600.000
euros, si el número de peticiones de ayudas supera las
previsiones.
El Ejecutivo local prevé que con esta medida pueda renovarse
más de la mitad de la flota de taxis de la ciudad autónoma,
que cuenta con 118 automóviles. En 2003 se puso en marcha
una iniciativa similar que permitió remozar menos de la
mitad del parque.
Cada taxista podrá beneficiarse de una subvención que podrá
sufragar hasta el 40% del coste del nuevo vehículo, con un
máximo de 10.000 euros que puede superarse en el caso de que
el coche a adquirir esté adaptado para el transporte de
discapacitados.
Los coches a subvencionar deben cumplir, además de la
normativa propia del sector, los requisitos medioambientales
del Plan 2000E.
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