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Es lo principal que marcó el discurso del presidente Juan
Vivas, junto a los afiliados del PP que el viernes por la
noche se reunieron para festejar estas fiestas con una Copa
de Navidad, con la que se despide el año y se comienza a
pensar en las nuevas pautas que se seguirán en el futuro.
El talante de Vivas volvió a estar a la altura de lo que es
y debe ser un presidente de todos los ceutíes y de todos los
del PP de Ceuta, cuando hay que abordar momentos de gloria o
algún asunto espinoso.
Y no es que fuera el momento de entrar en ese tipo de
asuntos, pero hubiera sido anómalo que el presidente de la
Ciudad y del Partido Popular no hubiera “explicado” a sus
correligionarios, aunque fuera en dos palabras, el asunto
más embarazoso del año, para el PP de Ceuta.
Vivas no lo esquivó, pero lo cogió con la elegancia y la
pulcritud que incluso no hubieran sido capaces de abordarlo
los más íntimos del ex presidente del partido, y con tres
palabras pasó a otro asunto.
También tenía que hacer alusión a alguna manifestación hecha
recientemente por parte de grupos de la oposición, pero no
iba a ser él, en tiempos de paz, el que abordara eso como
una guerra más, por lo que también “el mensaje” fue claro,
directo pero, yo diría que, excesivamente respetuoso. A
partir de ahí a otra cosa.
Lo que más claro quedó, cuando Juan Vivas se refirió a su
llegada a la presidencia del partido, es que para él lo más
importante es que el partido sea limpio, abierto,
transparente, unido y cohesionado.
Cinco palabras que resumen lo que hasta hace dos meses no
era el PP de Ceuta, en el que la apertura era, si acaso, una
quimera, propiciada desde las alturas del propio partido.
Respecto a la limpieza del partido, en épocas recientes
pasadas, ahí está el nepotismo, pero bajo ciertos tintes,
especialmente cuando de por medio había algún trabajo:” bien
sabes tú por quien has entrado aquí, luego no pensarás que
se te va a renovar”. Una frase pronunciada hace dos años,
por estas fechas y que marcaba el presente y el porvenir de
la persona hacia la que se dirigía y que, al final, llegó su
hora, también a quien la pronunció.
Transparente, esto debe ser, de ahora en adelante, el rumbo
del partido, dejando de lado la opacidad que tantos
comentarios, reales o supuestos, ha ocasionado, durante
varios años.
Unido. Esperemos que sea así de verdad y especialmente que
quienes no piensen igual que la cabeza del partido, no por
ello tengan que ser relegados a un segundo plano o al
ostracismo. Llegado a este punto, no puedo por menos de
acordarme de una frase, también desde la cabeza del partido,
ante unas elecciones generales y con Esperanza Aguirre como
testigo, frase a la que la propia presidenta de la Comunidad
de Madrid, a media voz, respondía con algo así como:” Muy
verde estás tú en política”.
Cohesionado, o lo que es lo mismo, sin fisuras y buscando
todos lo mejor para que si hoy es grande, en el futuro lo
sea más y si ahora es respetado, que ese respeto no se
pierda por unas acciones impropias de alguien que milite en
él.
En esta copa no podían faltar y estuvieron los de siempre,
aquellos que ya en las épocas de penuria, cuando eran mal
vistos los que pertenecían a AP estuvieron allí y dieron la
cara, como, por ejemplo, mi amigo Paco Luque, al que no se
ha valorado como es debido, en las épocas más brillantes del
partido. Naturalmente, también hubo muchos de los de nuevo
cuño.
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OPINIÓN
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