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El que viene siendo conocido como nuevo edificio de Sanidad
Exterior ha costado a la Delegación del Gobierno 350.000
euros y supone la última actuación del plan que ha venido
desarrollando la Administración Central del Estado para
mejorar sus infraestructuras en Ceuta, después de inaugurar
la nueva Oficina de Correos.
La Delegación del Gobierno en Ceuta ha invertido 350.000
euros en levantar el nuevo edificio que centralizará todo su
Área Funcional de Sanidad, dispersa hasta ahora en un
edificio de grandes proporciones que se encuentra en San
Amaro y otro que alberga las oficinas de Sanidad Exterior,
en el recinto portuario.
Según informaron a EL PUEBLO desde la propia Delegación del
Gobierno, las obras de construcción, que comenzaron en
agosto de 2008, están a punto de concluir, proporcionando a
la ciudad un moderno edificio ubicado en la zona de la
Estación Marítima con el que se espera no sólo mejorar las
condiciones de trabajo de los funcionarios de estos
departamentos sino también los recursos que les permitan
operar con una mayor eficacia.
Destaca entre la dotación de este nuevo edificio comúnmente
conocido como la sede de Sanidad Exterior la construcción de
una nueva cámara de almacenamiento para objetos y mercancías
procedentes de decomisos y incautaciones, con capacidad para
hasta nueve toneladas.
Las funciones del Área Funcional de Sanidad de la Delegación
del Gobierno resultan poco conocidas pero son
imprescindibles para numerosas operaciones vinculadas a las
relaciones exteriores que tienen un trasfondo sanitario.
Así, es este área la que en principio posee las competencias
para la revisión de mercancías tanto en la frontera como en
el puerto, aunque en la práctica esta tarea se encuentra
cedida a la Ciudad Autónoma de Ceuta.
No lo está, sin embargo, el control y distribución de
vacunas internacionales a países en situación de riesgo
sanitario, que sigue en manos de la Delegación del Gobierno.
Lo mismo ocurre con la autorización para la recepción y el
traslado internacional de cadáveres, un asunto especialmente
delicado que requiere la observancia de meticulosos
protocolos de actuación.
A este departamento le corresponde también la inspección y
control higiénico-sanitario de los medios de transporte y
del recinto portuario.
Su importancia en la gestión de la salud pública y la
calidad medio ambiental le confiere también la competencia
de elaborar el registro de las sustancias químicas que
entran en la ciudad de Ceuta.
Aunque las competencias de este Área Funcional de Sanidad
abarca muchos otros aspectos vinculados a las relaciones con
el exterior que nada tienen que ver con el control de la
entrada y salida de mercancías, almacenamiento de objetos y
sustancias procedentes de decomisos e incautaciones, la
distribución de medicamentos o la repatriación de cadáveres.
Así, el departamento tiene también un papel esencial en la
tramitación de certificados para la homologación de títulos
europeos.
El cuarto
Cuando se inaugure, éste será el cuarto de los nuevos
inmuebles que ha construido o reformado la Administración
Central del Estado en Ceuta.
El primero de ellos resultó las nuevas dependencias de la
Oficina de Extranjería, que tramita al año más de siete mil
expedientes, y a esta le han seguido en la última semana la
inauguración de la nueve sede de la Tesorería General de la
Seguridad Social y la nueva Oficina de Correos, de la que
sus responsables han destacado su singularidad
arquitectónica.
El nuevo edificio de Sanidad Exterior resulta mucho más
funcional tanto en su diseño como en su ubicación, no en
vano ha sido emplazado en el mismo recinto portuario, detrás
de la Casa del Mar y muy próximo al control de la Guardia
Civil, un lugar excepcional para vigilar el tráfico de
mercancías legales e ilegales en una ciudad tan dependiente
de las rutas marítimas como resulta Ceuta.
Para la Delegación del Gobierno era muy importante acabar
con la dispersión geográfica de los departamentos que
conforman este Área Funcional de Sanidad, y este nuevo
edificio ha sido concebido para atajar las incomodidades
derivadas de esta circunstancia.
Si se inaugura, como resulta previsible, en los primeros
meses del próximo año 2010, la obra se habrá ejecutado en el
plazo aproximado del año y medio, y ello aún considerando
que en este caso no se trataba de remodelar ningún edificio,
como en el caso de la Oficina de Extranjería, sino de
construir otro inmueble completamente nuevo.
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