El informe recoge la capacidad del cannabis para producir
una adicción. Se estima que entre el 7 y el 10% de quienes
lo han probado tienen riesgo de desarrollar un trastorno de
dependencia. Provoca el abandono del grupo de amigos no
consumidores, desinterés por actividades que no tengan
relación directa con el consumo, preocupación por disponer
de hachís, problemas de rendimiento escolar o laboral.
Entre un 7 y un 10 % de las personas que han probado alguna
vez cannabis, tienen riesgo de desarrollar un trastorno de
dependencia. Un estudio realizado por la Delegación del
Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, en colaboración
con el Observatorio Europeo de las Drogas y las
Toxicomanías, demuestra que un 2,2% de los adolescentes (en
torno a 40.000) que consumen cannabis habitualmente entre
los 14 y los 18 años presenta ya un consumo problemático.
Los datos coinciden con los de otro estudio europeo,
realizado en 2007, que sitúa en un 2% el total de
estudiantes de la UE a los que se puede definir como
consumidores problemáticos de esta droga.
Éstas son algunas de las conclusiones que se destacan en el
II Informe sobre el cannabis, realizado por la Delegación
del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas.
En él se actualizan los datos epidemiológicos de la primera
edición, publicada en 2006, y se recogen las últimas
evidencias científicas sobre los efectos clínicos y
toxicológicos del consumo de esta sustancia en la salud,
incluyendo los trabajos clínicos publicados en 2008 y
principios de 2009, la farmacocinética de esta sustancia y
la forma en que su consumo interactúa con otras drogas, así
como las novedades en el uso terapéutico de cannabinoides.
El informe se ha presentado durante el VI Seminario de
formación en cannabis, organizado por la Asociación de
técnicos para el desarrollo de programas sociales y ha sido
financiado por la Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas. Como ha señalado en su intervención
la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas,
Carmen Moya, “el cannabis es una droga y como tal se
comporta”.
“La revisión de los últimos estudios consolidan lo que ya
sabíamos: el consumo de cannabis produce alteraciones del
sistema nervioso central, déficits en la memoria, la
atención, la capacidad psicomotora y está directamente
relacionado con el fracaso escolar. También puede producir
otros trastornos mentales, como la psicosis”, ha subrayado
la delegada.
La droga más consumida
El cannabis es la droga ilegal de mayor consumo en todo el
mundo. Naciones Unidas estima que un 3,9% de la población
entre 15 y 64 años la ha probado en alguna ocasión en 2007.
En Estados Unidos, la Encuesta Nacional sobre Consumo de
Drogas y Salud 2007, cifra en un 5,8% la proporción de
personas mayores de 12 años que han consumido cannabis
alguna vez en los últimos 30 días (14,4 millones de
consumidores).
En los países de la Unión Europea, donde el consumo se da
sobre todo entre los jóvenes, la prevalencia del consumo
actual (último mes) oscila entre el 0,5% y el 8,7% de la
población, dependiendo del país.
Tanto en España como en la UE el consumo de esta droga se ha
estabilizado e incluso ha empezado a descender después de
aumentos continuados. Según la última encuesta escolar sobre
drogas, en 2008 un 35,2% de los jóvenes españoles de 14 a 18
años ha consumido cannabis alguna vez en la vida, un 30,5%
lo ha hecho en el último año y un 20,1% en los últimos 30
días. Esto supone un descenso de 7, 6 y 5 puntos,
respectivamente, desde 2004 para cada una de las frecuencias
de consumo.
“Pese a ello, las tasas de consumo, sobre todo entre los
adolescentes, siguen siendo elevadas”, ha alertado Moya,
quién ha señalado “la reducción del uso de esta sustancia
psicoactiva”, como uno de los principales objetivos del
Ministerio de Sanidad y Política Social.
La delegada también ha hecho hincapié en los policonsumos.
Entre la población escolar de 14 a 18 años, y en relación al
consumo en los últimos 12 meses, el 98,8% de los
consumidores de cannabis también lo era de alcohol, un 79,7%
de tabaco, un 11,3% de cocaína, un 7,7% de anfetaminas y un
5,8% de éxtasis.
En relación con los policonsumos, el informe presentado
analiza si el cannabis es la “puerta de entrada” al consumo
de otras drogas, como sostienen algunos investigadores.
Adicción
Amparo Sánchez, experta en adicciones y miembro de la
Comisión Clínica, ha subrayado los efectos negativos del
cannabis en la salud. En su intervención, Sánchez ha
destacado la edad de inicio en el consumo del cannabis como
un factor determinante en la evolución de los efectos de
esta droga sobre la salud. “La adolescencia es un periodo
crucial”, ha asegurado.
Según la última encuesta escolar sobre drogas, la edad de
inicio se sitúa en nuestro país en los 14,6 años.
Los estudios disponibles demuestran que el consumo de
cannabis aumenta el riesgo de problemas escolares y
sociales, así como alteraciones del sistema nervioso
central.
|