Los presidentes de Ceuta y Melilla volvieron a verse ayer
las caras en Madrid tras unos meses de no hacerlo para
constatar que sus relaciones siguen presididas por “la
lealtad institucional, la sinceridad y la amistad” y para
consensuar una estrategia común que obtenga el compromiso
del presidente Rodríguez Zapatero para propiciar durante la
Presidencia española de la UE que las dos ciudades reciban
un trato “similar” al de las regiones ultraperiféricas y que
puedan actualizar su REF.
Los presidentes de Ceuta y Melilla, Juan Jesús Vivas y Juan
José Imbroda, expresaron ayer su confianza en que en la
próxima Conferencia de Presidentes, que se celebrará el
próximo el 14 de diciembre, el Gobierno presidido por José
Luis Rodríguez Zapatero se comprometa a negociar ante las
autoridades comunitarias la concesión para las ciudades
autónomas de un estatus dentro de la Unión Europea
“equiparable al de las regiones ultraperiféricas (RUP)” .
“No pretendemos que se nos reconozca como RUP porque hay
impedimentos geográficos insalvables, pero queremos un
tratamiento específico equiparable al de las RUP”, aclaró
Vivas para evitar malentendidos.
En el Senado, en rueda de prensa, tras aunar una postura
conjunta para formalizar dicha petición y para actualizar su
Régimen Económico y Fiscal (REF) especial común, ambos
mandatarios expresaron a los medios de comunicación su
confianza en que el líder del Ejecutivo central comprometa
en la Conferencia de Presidentes su apoyo a las dos
ciudades, a las que situaron “en la vanguardia del sur, y en
la frontera de Europa y España”.
Vivas explicó que la Presidencia española de la Unión
Europea, que se prolongará durante el primer semestre de
2010, brinda una oportunidad “única” para atender esta
aspiración común.
El presidente ceutí argumentó que la petición se basa en una
serie de condicionantes como son la extrapeninsularidad de
ambas ciudades, su reducida superficie, la alta densidad de
población, el hecho fronterizo y la escasez manifiesta de
recursos naturales como el suelo, el agua o la energía.
En el mismo sentido se pronunció su homólogo melillense,
Juan José Imbroda, quien insistió en la necesidad de
aprovechar la ocasión porque “Ceuta y Melilla no se pueden
quedar, una vez más, fuera de vagón, ni siquiera en el vagón
de cola”.
En ese sentido el presidente de Melilla exigió a los
partidos políticos que incluyan en la Proposición No de Ley
que definirá las prioridades de la Presidencia de la UE que
se está negociando en el Congreso sus reivindicaciones, ya
que, recalcó, “todavía y, desgraciadamente, no se ha hecho”.
Falta “un paso decidido”
Asimismo, Imbroda señaló que en la Asamblea de Regiones
Periféricas Marítimas Europeas tanto Ceuta como Melilla
obtuvieron el “total apoyo” para que ambas tuvieran el
tratamiento de regiones ultraperiféricas, e indicó que lo
“único” que falta para que esto se lleve a cabo es que el
Gobierno ““dé un paso decidido para que estas ciudades no se
queden fuera, y puedan seguir avanzado económicamente”.
“Si nos quedáramos fuera sería totalmente injusto y sería
muy dificultoso para que la economía de Ceuta y Melilla
pudieran seguir avanzando”, indicó para recordar el volumen
de inmigración que hay en las dos ciudades y que hace que
tengan una población “mucho mayor que la pudiera tener
cualquier ciudad española en situaciones similares”..
Imbroda insistió en que las dos ciudades precisan de “un
tratamiento de choque” y recordó que hasta 30.000 marroquíes
atraviesan diariamente cada una de sus fronteras, “unos para
comerciar, otros para trabajar y otros para asistencia
sanitaria”. “El Gobierno debe de entenderlo y debe apoyar
este proyecto que estamos haciendo”, subrayó.
Reforma del REF
Tanto el presidente de Ceuta como el de Melilla coincidieron
igualmente en resaltar la necesidad de aprovechar también la
“oportunidad” que se abre con la Presidencia española de la
UE para actualizar el Régimen Económico y Fiscal (REF)
especial de que disfrutan ambas ciudades, ya que según
recordaron la modificación de parte del mismo “requerirá de
la autorización de las instancias comunitarias”.
Vivas e Imbroda destacaron que consideran “una necesidad”
culminar ese proceso de actualización porque el REF es el
instrumento con el que ambos territorios “pueden hacer
frente a su condición de regiones extrapeninsulares, a la
reducida superficie, la alta densidad de población o la
escasez de recursos como el suelo, el agua o la energía”.
Por ello ambos pactaron, tras las tensiones que generó la
entrega “informal” por parte de Ceuta al Ministerio de
Economía del primer borrador elaborado para el nuevo texto
por los consejeros locales de Economía y Hacienda, trasladar
sus reivindicaciones a un texto en el que se está trabajando
y que esperan tener finalizado “en dos semanas” para poder
comenzar a negociarlas con el Gobierno.
Su objetivo es que este punto entre dentro de la agenda de
trabajo de los grupos bilaterales que el vicepresidente
tercero del Ejecutivo y ministro de Política Territorial,
Manuel Chaves, se comprometió a crear en sus visitas a las
dos ciudades autónomas el pasado mes de junio.
Ceuta y Melilla, reiteraron sus dos presidentes, quieren una
actualización del REF vigente que les garantice el normal
funcionamiento de los servicios esenciales “en condiciones
de igualdad con el resto de España”, según explicó el
mandatario ceutí. También consideran que es necesario “un
nuevo impulso” para el fomento del empleo, la actividad
económica, la inversión y la competitividad del tejido
productivo local, además de mejorar sus comunicaciones con
el resto de España.
La reunión sirvió también para que Vivas e Imbroda
verificasen que sus relaciones siguen presididas por “la
lealtad institucional, la sinceridad y la amistad”.
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