La Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos de
Nuestro Padre Jesús Caído y Nuestra Señora de la Amargura de
San Juan de Dios durante los últimos meses ha venido dando
los pasos pertinentes para proceder al cambio de la imagen
de Nuestro Padre Jesús Caído, afirmando que la talla está
bastante deteriorada debido, en términos generales, a los
abundantes problemas estructurales que, después de un
exhaustivo estudio, han salido a la luz.
La talla actual de Nuestro Padre Jesús Caído, salió de las
gubias del imaginero malagueño Pedro Pérez Hidalgo en el año
1983, por lo que se puede afirmar que la imagen no es
demasiado antigua ya que cuenta con tan sólo 26 años.
Pese a relativa juventud de la talla, el actual hermano
mayor de la Cofradía, Jorge Ruiz Bru, presentaba en su
programa electoral, en el año 2006, la realización de un
estudio técnico de la imagen debido al paupérrimo estado de
conservación que presentaba, y proceder a su restauración o
en su defecto a la realización de una nueva talla con la
aprobación por parte de los hermanos de la Hermandad.
A principio del presente año 2009, y observando que el
deterioro de la imagen se agravaba, la Junta de Gobierno
encargó a la restauradora Inmaculada Rodríguez un estudio de
la talla, del cual se desprende que la imagen tiene
abundantes problemas estructurales que ha ido desembocando
en grietas bien diferenciadas tanto en su profundidad como
en su ubicación en hombros, torso, zonas inferior y superior
de las piernas, la unión en las rodillas, siendo según la
restauradora alarmante el estado de conservación de la
talla.
Tras este estudio, en un cabildo celebrado el 21 de abril
del presente año, se propone iniciar los trámites para
cambiar la imagen, barajándose desde ese mismo instante
varios escultores, quienes comenzaron a ser descartados tras
estudiar sus currículum, bocetos, estudios fotográficos,
etc., hasta quedarse finalmente con el imaginero Darío
Fernández, escultor joven, de vocación temprana, discípulo
de Antonio Dubé de Luque, y que cuenta con un gran número de
obras de reconocido prestigio.
Después de todos estos pasos se le comunica al Consejo de
Hermandades y a la Vicaría la intención de la Hermandad,
dándo estos organismos el visto bueno a la Cofradía para
convocar cabildo general extraordinario de hermanos para
presentar la propuesta y que esta sea respaldada o no por
ellos.
Finalmente, el pasado día 27 de noviembre, de los 482
hermanos citados asistieron tan sólo 65, de los cuales 52
respaldaron la propuesta de la Junta de Gobierno, 11 la
rechazaron y 2 se abstuvieron, por lo que la intención de
cambiar la imagen recibió el respaldo de los hermanos.
Ahora, y después de todos los pasos dados, se ha recopilado
toda la documentación y los estudios realizados para que
estos sean enviados a la Comisión Diocesana de Patrimonio de
Ceuta y Cádiz, ya que será esta comisión la que deberá
estudiar el caso y decidir si finalmente se cambial la
imagen.
|