El Murallas de Ceuta sigue demostrando que es más que capaz
de salir de la difícil situación en la que se encontraba
inmerso. Después de sumar sólo cuatro puntos en once
jornadas, el equipo caballa comenzaba a hundirse en un pozo
del que parecía que era difícil salir.
Sin embargo, tras la llegada de Guillermo Ganet al banquillo
naranja, el equipo comenzó a experimentar un cambio que ya
se vio reflejado en el partido ante el Algeciras, donde los
ceutíes cayeron por la mínima. Fue en el siguiente partido,
ante un Atlético Sanluqueño situado séptimo, cuando el
Murallas demostró que no estaba dispuesto a tirar la toalla,
obteniendo los tres primeros puntos de la ‘era Ganet’.
Pero la prueba de fuego se encontraba en el siguiente
partido. En trece jornadas los ceutíes no habían sido
capaces de puntuar a domicilio, por lo que era una gran
oportunidad para comprobar la mejoría real del equipo. Una
mejoría que se demostró con un nuevo triunfo, con el que los
ceutíes comenzaban a alejar los fantasmas a la misma
velocidad que se acercaba a la permanencia.
Sin embargo, todo ese trabajo se hubiese echado por tierra
si el Murallas no hubiese conseguido el sábado, como al
final lo hizo, una nueva victoria frente a Los Barrios, con
el que consiguió su tercera victoria consecutiva que le
permite dormir esta semana a sólo dos puntos de la
salvación.
Tras descansar esta jornada, el Murallas regresará el 13 de
diciembre a la competición con un choque vital ante el
Córdoba B.
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