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cultura - SÁBADO, 28 DE NOVIEMBRE DE 2009


Un momento de la representación. f. r.

teatro
 

La insatisfacción de la madurez
a escena en el Siete Colinas

El Centro Dramático de Ceuta repite hoy –20.30 horas– la representación de la obra
de Moncada ‘El hombre del atardecer’
 

CEUTA
Rober Gómez

ceuta
@elpueblodeceuta.com

En uno de sus años más especiales, el Centro Dramático de Ceuta, recientemente galardonado con el Premio de las Artes y la Cultura de la Ciudad Autónoma por sus 25 años ininterrumpidos ofreciendo el arte de la actuación, puso en escena su última obra del año, ‘El hombre del atardecer’, de Santiago Moncada, una alta comedia que reflexiona sobre la insatisfacción de la madurez. La compañía ceutí dará hoy, a partir de las ocho y media de la tarde, un segundo pase en el auditorio del Instituto de Educación Secundaria Siete Colinas.

Bajo la dirección de Manuel Merlo, los actores locales Carmen León, Marta Vila, Adán León, Pedro Alonso Menllé y Olga Martí dieron ayer vida a los personajes de El hombre del atardecer, obra de Santiago Moncada, escritor y dramaturgo madrileño que fue finalista del Premio Planeta con la novela El stress.

Pese a tener un tono cómico, El hombre del atardecer habla de la melancolía de la soledad otoñal de la vida. “En ese instante”, comentaba el propio autor, “y durante cierto tiempo, la inteligencia, el sentido común y, en ocasiones, hasta la dignidad y el temor al ridículo quedan anulados”, llegándose finalmente a la “resignación”.

Sobre este tema del tránsito mental de una edad a otra, con todo lo que se pierde y lo poco que se gana, se han escrito numerosas comedias, la mayoría de ellas muy jocosas, porque el esfuerzo de aparentar algo que ya se ha perdido resulta siempre patético y, por tanto, fácil para la distorsión y la caricatura; algo de lo que Moncada huye en El hombre del atardecer, donde no quiere ser premeditamente divertido, siendo más bien indulgente, “sonriendo más que ridiculizando”, apunta el propio autor.
 

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