El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta está valorando la
posibilidad de no abrir este año las puertas del Matadero
Municipal situado en Sidi Embarek ante el aumento del número
de carpas que se prevé realizar, hasta 13, con cuatro
nuevas, para poder así dar descanso en una jornada
“especial” a los trabajadores que allí desempeñan su labor,
la mayoría de los cuales son de confesión musulmana, según
informaron ayer fuentes de la Asamblea.
El Ejecutivo local tiene previsto colocar este año carpas en
todos los emplazamientos habituales (Benzú, Ferrocarril,
Villajovita, Bermudo Soriano, San José-Hadu, Pasaje Recreo,
Príncipe Alfonso, Príncipe Felipe y Juan Carlos I) y
situarlas también el próximo sábado en Finca Guillén,
Sardinero, Sidi Embarek y Miramar Bajo.
Con estas instalaciones la Administración local persigue
facilitar a los ceutíes musulmanes el cumplimiento de una de
sus obligaciones religiosas y garantizar además en la medida
de lo posible que los sacrificios se hagan en las debidas
condiciones sanitarias.
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