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Estos chaparrones, que cito, no son producidos por la
climatología, estos han sido montados, desarrollados y
concluidos por gentes que, desde el poder, o muy cercanos al
propio poder, han roto la aparente tranquilidad, sosiego y
progreso de una Ceuta próspera, pero ..., con sus cosas.
EL BARCO PORTADOR DE AGUA
Quienes habíamos conocido, en épocas pasadas, esta
circunstancia, habíamos ido perdiendo, poco a poco, aquel
sentimiento de restricciones que se daban en la Ceuta de los
70, los 80 o los 90, cuando había unas cuantas horas de
suministro de agua y otras muchas horas de agua cortada.
En aquellos tiempos, las desaladoras, o simulacros de
desaladoras, no daban a basto para lo que se necesitaba y el
aprovisionamiento de los demás lugares era tan escaso que,
necesariamente, había que recurrir al suministro del otro
lado del estrecho, a través de un barco. Eso costó un
dineral y el suministro era restringido.
Con este Gobierno de la Ciudad, casi se habían eliminado los
cortes del suministro y el barco, por tanto, había
desaparecido, porque las nuevas instalaciones de una moderna
desaladora, que parecía el logro más importante para la
historia en Ceuta, proporcionaría agua en abundancia.
Los cálculos, a alguien, le fallaron y no ha hecho más que
venir un verano seco y un otoño más seco, todavía, para que
el suministro peligrara y hubiera que recurrir, decían que
para un mes, otra vez al barco, evitando así, de momento,
las restricciones.
¿Dónde estuvo el fallo?. Sinceramente, creo que en las
previsiones, por parte, no del político, sino del técnico en
cuestión, pienso yo.
Era el primer chaparrón a primeros de octubre.
LOS RECIBOS DEL AGUA
Fue el segundo chaparrón que se le vino encima a este
Gobierno, cuando al cambiar de “técnico” administrativo en
el departamento correspondiente, ven que hay una serie de
familias, todas relacionadas con el agua, que no pagan
ningún recibo, porque a ellos no se les están pasando los
recibos cada mes cuando se pasan a los demás.
Aquí se armó la de “Dios es Cristo”, especialmente cuando a
cada una de esas familias, de un golpe se les pasan unos
recibos de “en torno a “4000”€, con lo que se plantean
varios problemas. ¿Es que todos han gastado la misma
cantidad?.¿Es que ha habido alguien que devolvió el
recibo?.¿No es que hubo de siempre un “acuerdo” expreso o
tácito sobre la gratuidad del agua a aquellos que trabajaban
en estas dependencias?.
Sin lugar a dudas, el listo de turno se pasó de listo o
quiso solucionar una parte del “barquito” que había
comenzado a operar con el cargamento de agua.
El asunto no ha terminado.
EL BOMBAZO DE FINALES DE OCTUBRE
Tuvo como protagonista al hombre que más poder ha tenido en
Ceuta en los últimos 30 años, de todos los que yo he
conocido aquí.
Una grabación comprometedora mueve los cimientos de la
Ciudad Autónoma y termina con la cabeza de Pedro Gordillo en
la política.
Desde la Ciudad Autónoma se ha dicho que dimitió, yo siempre
he hablado de “cese-dimisión”, porque si bien es cierto que
hay firmada una dimisión, todos sabemos como se hizo esa
firma, en aquel momento, no de puño y letra del autor, ya me
entienden los que conocen eso, como yo lo he conocido.
Una grabación a traición dejaba un cadáver político en la
cuneta y ese “cadáver político” era la persona de más poder,
pero por eso mismo la más rechazada por muchos sectores,
incluso dentro de su partido, con lo que la pregunta queda
claro. ¿Fue desde dentro, desde donde se promovió esa
grabación, conociendo las “aficiones” de la persona que iba
a ser grabada?. Si uno, todavía a esta edad, “se chupara el
dedo”, podríamos decir que eso era imposible y sería
imposible, o más difícil, al menos, si en torno a todos esos
organismos, fueran todos profesionales, pero cuando además
de esos profesionales hay un batiburrillo, a veces
deleznable, parte del cual procedente del “¿Qué hay de lo
mío?”, pues no debe extrañar que la cabeza de turco, la que
ha dado la cara, haya sido una mujer, seguro que con razón,
pero movida ¿Por quien?.
Será la Justicia la que diga la última palabra, pero hasta
tanto se seguirán escondiendo, tras las bambalinas, los más
implicados, tras haber hecho ¿El favor? o ¿La traición?, a
quien creyó que tenía todo, atado y bien atado, pero no
sabía, a pesar de haber sido cura, de la misa la mitad.
Yo he escrito hace días que “los dioses griegos no toleraban
el exceso de felicidad en los hombres” y tengo que decir
ahora que, hoy son los propios hombres los que no soportan
que alguien, un “homo novus”, sin antecedentes políticos,
ascienda tan rápidamente, con un aval, únicamente, del
“cielo”, por aquello de haber sido cura, pero sin haber
estado codo con codo en la tierra, pegando carteles, desde
abajo, por ejemplo.
Es posible que Pedro Gordillo se mereciera ser apeado de ese
pedestal en el que se había colocado él solo, a base del “
to pa mí”, pero no menos cierto es que no hubo nadie con la
hombría suficiente para decirle en su cara “ que se estaba
pasando”.
Sigo con la pregunta ¿Quién ha movido y promovido la
defenestración de Pedro Gordillo?. La grabación ha sido un
medio, pero ... hay más, tiene que haber más por detrás.
Con esto, y Juan Vivas que ha sido muchos años un gran
profesional de esa casa lo debe saber, a partir de ahora
creo que más de uno de esos colaboradores de los que
merodean por los despachos pueden tener los días contados, o
la confianza recortada.
Y otro tanto hay que decir de aquellos del grupo del propio
Gordillo que, tras la salida de este, no se han atrevido a
cogerle el teléfono. ¿Por cobardía?. ¿Por incompetencia?.
¿Por miedo a que quienes promovieron la grabación de antaño
puedan grabar también las conversaciones?. Posiblemente por
todo. ¡¡Qué poca dignidad!!.
PEPIÑO BLANCO Y EL PARAGUAS
Es curioso, para parar todo este chaparrón, o para atenuar
la situación, ha tenido que venir un ministro de un partido
ajeno, del PSOE, y con su visita, con sus promesas que se
harán realidad, calmar el temporal, o echar una cortina de
humo delante de la hoguera.
Si los asuntos tratados entre el ministro José Blanco y las
autoridades ceutíes dan sus frutos, entonces, todos los
problemas pasados serán menos problemas, de lo contrario el
problema del agua hará estragos, sin llover, el barco
seguirá cruzando el estrecho, los recibos
“variosmileuristas” seguirán revoloteando y el asunto grave
del descrédito, de Pedro Gordillo veremos en qué termina,
especialmente si a este le da por hablar.
¿Hasta donde puede llegar la insaciabilidad y la envidia
humana?. No lo sé, pero lo que sí queda claro es que éste no
es el mejor otoño que ha vivido Ceuta. Eso desde luego.
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OPINIÓN
