No sé muy bien de qué, porque si
las obras están concluidas habrá que poner en funcionamiento
tanto el nuevo Polideportivo, como la nueva Hípica.
Las razones que se aducen son de orden técnico, mejor dicho,
de unas pruebas eléctricas. Me parece muy bien que se
comience con todo concluido de verdad, probado, garantizado
y listo para ser utilizado, porque de lo contrario es estar
metidos en una chapuza, que hoy, menos que nunca, interesa
al partido que, con aplastante mayoría, está en el poder
aquí en Ceuta, con todo lo que eso conlleva y puede seguir
conllevando en los próximos meses.
Ya estamos cerca, pues, si definitivamente el traslado de
los caballos de la escuela hípica de Viña Acevedo a las
nuevas instalaciones de García Aldave se produce a mediados
de noviembre.
Esto, al menos, parece que es lo que prevé la consejera de
Juventud, Deportes y Nuevas Tecnologías, porque, dicen, el
recinto terminado está a la espera de las pruebas
eléctricas.
Siempre habrá quien piense que este es un problema menor, si
lo comparamos con otros que han ido surgiendo recientemente,
pero también, los que practican esta modalidad deportiva,
tienen unos derechos, y esos derechos, por las nuevas
reestructuraciones y el cambio de un lugar a otro, no los
han podido ejercer desde septiembre, hasta ahora.
A cada uno lo suyo y a los que practican, en cualquiera de
sus modalidades, la hípica, habrá que darles ese lugar que
necesitan y el acondicionamiento de esas nuevas
instalaciones, lo mejor que se pueda.
Y aquí entramos en el “están terminadas las obras”, pero no
es así, las obras, cuando estén terminadas, permitirán, sin
ningún problema, poder practicar ahí, con lo que si es que
quedan por realizar las pruebas de sus sistemas eléctricos,
es que, todavía, falta algo, hasta que la empresa de
alumbrado las dote de la línea de suministro.
Aquí no se trata de simple apreciación, se trata de ver
concluida una obra, para poder hacer uso de ella, o se trata
de esperar hasta que se haya terminado, de verdad.
Y desearíamos que los plazos previstos se cumplan a tiempo
o, si se adelantan, todavía mejor, porque no estamos
hablando de media docena de usuarios, estamos ante el
traslado de 120 caballos y ponis, con los que cuenta esta
escuela pública.
La paralización de la actividad hípica ha hecho que, por
encima de los 300 alumnos hayan tenido que dedicarse a otras
cosas, en este tiempo.
Pero lo que hay que valorar, en su justo sentido, es que la
actual (cuando se comience a utilizar) escuela tiene unos
44000 metros cuadrados, o sea en torno al doble de la
superficie de que se disponía en Viña Acevedo.
Esta nueva Hípica se comenzó a construir en el año 2007 y
los terrenos, también, han sido cedidos por Defensa, igual
que, en su día, había cedido los de Viña Acevedo.`La nueva
Hípica, desde luego, aventaja en todo a la anterior, desde
el espacio, hasta los medios de que va a disponer, por
ejemplo, tres pistas en vez de dos, a lo que hay que unir
que todas las instalaciones están agrupadas en un único
edificio.
Deseamos que la expectativa sea para estas dos semanas, tan
sólo.
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