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La portavoz del Gobierno y consejera de Medio Ambiente,
Yolanda Bel; el titular de Hacienda, Francisco Márquez; y el
responsable del Área de Fomento, Juan Manuel Doncel, se
harán cargo a partir de mañana, cuando el presidente de la
Ciudad, Juan Vivas, dé cuenta al Consejo de Gobierno de sus
planes para cubrir la marcha del hasta ahora vicepresidente
y consejero de Presidencia, Pedro Gordillo, de la mayor
parte de las competencias que este gestionaba hasta el
viernes en función de la afinidad que tengan a sus cometidos
actuales.
Según fuentes de toda solvencia el líder del Ejecutivo local
es partidario de repartir entre estos consejeros, que
sostienen la mayor parte del peso político y administrativo
de la Ciudad, las áreas de gestión que correspondían al
departamento de Presidencia desde las últimas elecciones
autonómicas y, de paso, adelgazar el gasto que para las
arcas municipales supone sostener al Gobierno, cuya
estructura ya se procuró no engrosar, según destacó el
presidente en su momento, tras los comicios de 2007.
A la Consejería de Presidencia que ocupaba hasta el viernes
Pedro Gordillo le correspondía el ejercicio de las
competencias de la Ciudad Autónoma de Ceuta en materias de
naturaleza estrictamente administrativa como la gestión
interna incluido el ornato y conservación del Palacio
autonómico y demás dependencias de la Ciudad; el Boletín
Oficial de la Ciudad Autónoma de Ceuta (BOCCE); el depósito
municipal de vehículos; la “ordenación y gestión del Almacén
Municipal”; el Registro General y el ámbito de “información
y estadística” o el “desarrollo reglamentario de los
distintos órganos de la Ciudad Autónoma”.
Igualmente el consejero dimisionario era el responsable del
funcionamiento de los Servicios Jurídicos de la Asamblea y
de “los sistemas de información y telecomunicaciones
corporativas”, así como “el impulso, dirección y
coordinación del proceso de modernización de la
Administración” y el Centro de Proceso de Datos (CPD).
En un plano de naturaleza más estrictamente política a la
Consejería de Presidencia le competía “la asistencia y apoyo
a los servicios y cometidos de la Presidencia” y el
“desarrollo autonómico”, un tema que, centrado en la
elaboración de un nuevo Estatuto de Autonomía, ya llevaba de
la mano con Bel y Márquez. Igualmente a este área le tocaba
asumir la “resolución de conflictos de competencias entre
Consejerías” y la “coordinación de la Viceconsejería de
Recursos Humanos” que ocupa Javier Díez Nieto.
Los transportes público urbano, terrestre y por cable y la
“ejecución de medidas derivadas de la responsabilidad penal
del menor y protección de menores”, así como Protección
Civil y servicio de emergencias 112.
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crisis de gobierno en la ciudad
autónoma
