Las máquinas de la empresa Corsán-Corvián, a la que la
Ciudad Autónoma tiene adjudicadas las obras de
rehabilitación de la carretera en el barrio de San Antonio,
partieron el pasado jueves las conducciones del agua y
Acemsa se vio obligada a cortar el suministro. El
abastecimiento no se restableció hasta ayer por la mañana,
por lo que se ha debido buscar alternativas para los
edificios sin aljibe.
El barrio de San Antonio, en el Monte Hacho, se quedó en la
tarde el jueves sin agua y el suministro no pudo
restablecerse hasta ayer a las cinco y media de la mañana.
Las esperadas obras de rehabilitación de la carretera, tras
el incendio y el temporal que asolaron el enclave el pasado
otoño, han comenzado con un traspiés.
Según explicó a EL PUEBLO el portavoz de los vecinos,
Ignacio Becerra, en cuanto las máquinas comenzaron el jueves
a taladrar el pavimento se encontraron con la vieja tubería
de conducción de las aguas, que se partió inmediatamente
evacuando centenares de litros, por lo que empresa municipal
Acemsa se vio en la tesitura de cortar el suministro a toda
la zona.
Becerra apuntó que la fragilidad de las conducciones se debe
a su antigüedad y el material de que están hechas: uralita,
que no resistió si quiera el comienzo de los trabajos.
Hasta que no se ha sustituido la tubería destrozada no se ha
podido restablecer el suministro. Lo que ha tenido sin
abastecimiento a todas las viviendas e instalaciones del
enclave que no poseían aljibe propio.
El presidente de los vecinos de San Antonio Monte Hacho
explicó que la Ciudad había tenido que trasladar una cuba de
agua hasta el Centro de Menores alojado en el barrio, para
no dejar desabastecida la atención de tantos adolescentes,
pues esta es una de las instalaciones que carecen de aljibe
propio.
La rehabilitación de la carretera situada en la parte
trasera de la antigua discoteca estival La Cueva era el
primero de los trabajos presupuestados por el Gobierno local
para rehabilitar este barrio, castigado por las catástrofes
naturales hace ahora poco más de un año.
Los trabajos de reparación han sido adjudicados a la empresa
Corsán-Corvián, que se ha encontrado con la debilidad de las
conducciones de agua al perforar el suelo. Así que la
recuperación del barrio no ha comenzado sin trastornos para
los vecinos.
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