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Comenzaba la mañana del domingo, como tantas otras en las
que hay fútbol a las doce del mediodía. El cambio de hora
había desorientado a muchos y despistado a otros que,
todavía, no se habían enterado que las doce de este domingo
venían más retrasadas que las del día anterior.
Con todo y eso, la clientela no llegó ni a tiempo, ni con
retraso. El fútbol que hay atrae a los seguidores de siempre
que van al campo en segunda B, en tercera, o si se diera el
caso en segunda A, pero sin aumentar mucho más. Es lo que
hay.
La taquilla se resintió en esta ocasión, parece que, un poco
más y el primer pagano fue el taquillero, no nos lo
explicamos, pero su gratificaciones vio reducida, eso es lo
que se decía en las cercanía de la barra del bar: en 5 €, de
menos.
Repito que es inexplicable, porque, que sepamos, nunca
cuando hubo un buen taquillaje se le dio una propina al
encargado de vender las entradas, y no sé si D. Cecilio, que
es el que más aparece en las fotos, también aparecerá un día
para decir que los recortes se hacen en todo, incluso en lo
que le afecte a él, pongamos por caso.
Habíamos comenzado con un sabor agridulce, en algo que no
debiera darse. De todas formas, lo material puede pasar,
pero lo que no debe pasar y es un borrón que quedará en el
debe de la directiva actual que, en teoría, quiere estar a
bien con todos, es que se olvidaran que dos días antes había
fallecido un ex alcalde de Ceuta, Fructuoso Miaja, y esta
directiva que tan lista anda para anunciar cumpleaños, de
todo el mundo, incluso el de Manolo el del bombo, no tuvo la
mínima deferencia, no tuvo el mínimo recuerdo, para guardar
un minuto de silencio en memoria de Fructuoso Miaja.
Es lamentable que estemos más pendientes de otras cosas que
de mejorar la imagen del club, porque la imagen del club,
también, se fortalece teniendo la deferencia de guardar un
respetuoso minuto de silencio por un ex alcalde de Ceuta,
que nos acaba de dejar a los 91 de edad, habiendo militado,
durante toda su vida, en un mismo partido y sin cambiarse de
chaqueta.
¿Quién se encarga de todos estos asuntos?. Si al encargado
se le ha pasado, por lo que haya sido, una solución “de
compromiso”, pero solución, hubiera sido que alguien de los
del palco, D. Cecilio, por ejemplo, le hubieran dicho a
aquel al que se le había pasado, que ese minuto de silencio
se guardara al ir a comenzar el segundo tiempo. No hubiera
sido lo mejor, pero peor ha sido lo que se ha hecho.
Si ese minuto de silencio no se ha guardado porque lo han
considerado molesto, para quienes pensaran de otra forma,
espero, deseo y además les pediría que en el futuro no se
guarde en ese campo ningún otro reconocimiento hacia nadie,
para evitar comparaciones, que siempre suelen ser odiosas.
Con estas dos “piruetas” antes del comienzo del partido, lo
verdaderamente milagroso es que luego ya hubiera orden
total, y sí que lo hubo, porque para que no se desordenara
nada más, ahí estuvo el “banderillero” que emulando al
famoso Rafa Guerrero de “penalti y expulsión”, sin que
sepamos si el “artista” del centro del campo le dijera:” no
me jodas...”, corrió hasta el fondo de vestuarios, llamó al
trencilla sevillano, marcaron el punto de penalti, se fue el
visitante a los vestuarios, el Ceuta marcó el 2-0, y ya con
40 minutos de por medio, pero con el adversario jugando con
sólo 10, no quedaban posibilidades de más sufrimientos, por
más que el Moratalla con 10 no es nada, con 11 puso
voluntad, pero aunque hubiera jugado con 12 no debía ser
adversario para vencer al Ceuta en Alfonso Murube.
Tal como fueron las cosas, el resultado fue incluso corto y
nos quedamos sin ver al portero ceutí Rafa Ponzo, porque no
le tiraron con peligro ni una vez, aunque a la salida de un
corner, en una pelota floja, ya en la segunda parte, las
manos parece que le temblaron un poco. No corrió peligro,
pero ..., habrá que verlo en ocasiones en las que tenga que
intervenir más.
Y pagano de la derrota de Murcia, en principio, fue Ramón.
Poca suerte tiene este chaval, y eso que ha cumplido cuando
ha salido, pero apuntaba a que sería el suplente de
Taranilla, luego, cuando se fue aquel, ha cumplido
dignamente y ahora, de nuevo, al banquillo. La pregunta que
uno puede hacerse es ¿Si rafa Ponzo logra algo de superior
categoría en el mercado de invierno, se va a seguir contando
con Ramón? O, tal vez, la pregunta mejor sea ¿Confía Ramón
en que van a contar con él?.
Maestros tiene la “santa casa blanca” para aclarar todo, a
lo largo de la temporada.
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OPINIÓN
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LA CRÓNICA
