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Los servicios para el público se estropearon a la vez y
existen mesas de estudio sin luz “desde hace años”. El
director ha hablado con los usuarios, ha iniciado los cauces
para solventar los problemas y si bien reconoce que la
biblioteca tiene muchos años, también afirma que su estado
es bueno y se invierte en mejoras cada año.
La única biblioteca pública de la ciudad sigue condenada al
olvido para algunos de sus usuarios. Mohamed Mustafa Bilal
estudia unas oposiciones y es uno de los usuarios cotidianos
del centro. Junto a otros compañeros, han decidido pedir
cuentas “como tantas otras veces a la dirección y ponerlo en
conocimiento de los medios porque la intención de solventar
los problemas es buena, pero las reparaciones tardan mucho
en llegar y los perjudicados somos nosotros”. Los servicios
de infantil y de adultos se han estropeado el mismo tiempo
“y no hemos tenido aunque sí se nos ha permitido utilizar
los del personal del centro”.
Además los usuarios han recordado al director de la
Biblioteca Municipal, José Antonio Alarcón, que varias mesas
de estudio carecen de luz. Alarcón ha puesto en conocimiento
de los técnicos responsables. “De 25 mesas seis no funcionan
y ya hemos pedido que vengan a revisar la instalación
eléctrica y respecto a los servicios uno ya lo hemos
arreglado los propios trabajadores del centro y el otro
estamos esperando a que vengan a repararlo los técnicos”.
El director del centro ha recordado que la Ciudad ha
invertido este año 30.000 euros en la reparación de la
techumbre “una obra imprescindible para salvaguardar todos
los fondos”, además de los 20.000 destinados al proyecto y
puesta en marcha de la Mediateca. Responsables y usuarios
parece que han llegado a un acuerdo del que esperan resolver
las averías cuanto antes por ambas partes.
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