ACTUALIDAD - SÁBADO, 17 DE OCTUBRE DE 2009

CEUTA
Redacción
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A menores reservas, menos suministro. Los problemas de abastecimiento de agua potable han estado a punto de llegar al paroxismo hasta que el Gobierno autonómico ha podido articular una estrategia de emergencias. La Ciudad Autónoma tuvo que reducir en 7.000 metros cúbicos diarios la cantidad de agua suministrada a la red, por lo que la sociedad ceutí no ha podido seguir consumiendo los 30.000 metros cúbicos de recursos hídricos al día que venía necesitando como promedio.

Los problemas de abastecimiento de agua potable a al ciudad han llegado a extremos que han dejado a la ciudad casi con lo justo de su reserva estratégica, como lo demuestran las propias medidas de racionamiento que ha debido adoptar el Gobierno autonómico.

La sequía ha resultado tan aguda, que la Ciudad Autónoma no ha podido garantizar los 30.000 metros cúbicos de media que venían consumiendo los hogares, empresas y servicios públicos del enclave.

Hasta 7.000 metros cúbicos menos ha debido bombear la empresa municipal de aguas a la red de abastecimiento para no tener que utilizar la reserva estratégica de los embalses del Renegado y El Infierno, imprescindible para mantener el ecosistema de los pantanos y poder hacer frente a cualquier eventualidad que elevara a situación de emergencia los problemas de desabestecimiento.

Es decir, que la Ciudad Autónoma de Ceuta ha tenido que subsistir durante aproximadamente el último mes con un 23 por ciento menos de agua en la red de suministro de lo que solía ser su consumo habitual.

Pero hay más, de estos 23.000 metros cúbicos de agua con los que han tenido que salir adelante las familias y empresas ceutíes sólo 3.000 han podido suministrarse de los embalses, lo que da una muestra de la dependencia actual de la ciudad de la desaladora, pendiente de una más que necesaria ampliación de sus instalaciones.

Sin duda, unas cifras que explican los sacrificios presupuestarios que ha tenido que asumir la Ciudad Autónoma de Ceuta para que el abastecimiento de agua no sufriera un colapso de proporciones alarmante.
 

A 20.000 metros cúbicos de la reserva estratégica

Los embalses del Renegado y el Infierno, que abastecen parcialmente de agua potable a la Ciudad Autónoma de Ceuta, se han quedado a sólo 20.000 metros cúbicos para rozar su reserva estratégica, que según reconocían hace una semana los responsables de la estación depuradora, ha debido ser ligeramente replanteada como consecuencia de la sequía.

Ahora los dos embalses no acumulan más de 203.695 metros cúbicos de agua. Es decir, que disponen de apenas 24.000 metros cúbicos por encima de los 180.000 que componen su reserva estratégica. La sequía ha llegado este año al paroxismo. Los embalses se han llegado a situar a sólo el 8,91 por ciento de su capacidad. Las medidas adoptadas a corto plazo han acaparado toda la atención de la sociedad, particularmente la contratación del barco aljibe. Pero las necesidades de recursos hídricos de la Ciudad Autónoma de Ceuta necesitan otro tipo de iniciativas a medio y largo plazo. Una de ellas pasa por aminorar todo lo posible las fugas de agua de que adolece la red de suministro, para la cual las obras de renovación de las canalizaciones constituyen una buena herramienta.

Aunque el Gobierno autonómico ha planteado otras más, como la digitalización de la información sobre todo el agua procedente de los embalses, los manantiales de Benzú y, sobre todo la desaladora, que afronta el ya mencionado proyecto de ampliación. En realidad, los trabajos de mejora de todo el sistema de suministro de agua potable se iniciaron hace bastante tiempo.

Como el caso de la estación que depura los recursos procedente de las fuentes citadas y los impulsa a la red de abastecimiento de la ciudad, que hace doce años fue objeto de una profunda remodelación y modernización y fue dotada de un nuevo decantador de aguas.