sociedad - JUEVES, 8 DE OCTUBRE DE 2009

CEUTA
Gonzalo Testa
ceuta@elpueblodeceuta.com

La Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE) que preside Laarbi Maateis trasladará en breve una propuesta formal a la Ciudad Autónoma y a la Delegación, para que esta a su vez la gestione ante los ministerios de Justicia o Cultura, para que colaboren administrativa y económicamente a fin de facilitar que jóvenes ceutíes puedan completar su formación como imames. El proyecto, en el que la federación viene trabajando desde hace tiempo, pretende que los ceutíes con tal vocación puedan superar con mayor facilidad los obstáculos de índole económico que en reiteradas ocasiones han impedido su incorporación a las universidades de referencia a nivel internacional, de entre las que la UCIDCE cita las de Madina Al Munawara y Riad, en Arabia Saudí, y El Cairo, en Egipto. En la primera de ellas ya se encuentra actualmente un joven ceutí becado por el propio centro académico. Otra solicitud, presentada también el año pasado, fue rechazada. Antes la universidad había aceptado a otros cinco estudiantes ceutíes, pero ninguno de ellos acabó viajando “por diferentes circunstancias personales, familiares o económicas”, según explica Maateis.

El vicepresidente del Gobierno local, Pedro Gordillo, aseguró ayer a este periódico que la Ciudad será “receptiva” a estudiar la iniciativa de la UCIDCE. “Todo lo que sea ayudar a la formación de jóvenes ceutíes, también en Teología islámica, tendrá nuestro apoyo por el bien de Ceuta si es factible”.

“En Ceuta”, asegura el presidente de la UCIDCE, “hay jóvenes que tienen el Corán memorizado y que podrían completar su formación en jurisprudencia islámica y exégesis del Corán para ejercer como imames en su ciudad, tomando las riendas de su tierra y asumiendo su responsabilidad con el futuro de esta”.

Conocedor del percal, Maateis avisa: 1) en cualquiera de los tres centros los estudiantes serían formados en la escuela islámica “del Imam Malik”; 2) el proyecto no pretende entablar una batalla con Marruecos, de donde son nacionales todos los imames principales que trabajan en la ciudad excepto Ahmed Liazid y Ahmed Tahar Benhamu, ambos con nacionalidad española.

No obstante, Maateis no oculta que lo sucedido en las semanas previas a la Musal-la de final de Ramadán, cuando la Delegación del Ministerio de Asuntos Religiosos de Rincón “amenazó” y trató de coaccionar a los imames que trabajan en Ceuta para impedir que oficiasen o participasen del rezo colectivo organizado por la UCIDCE en Loma Margarita tiene algo que ver con la necesidad de impulsar esta iniciativa. La federación ha iniciado “gestiones con las Administraciones que corresponden” para saber si lo ocurrido contaba con el beneplácito de las autoridades con mando en plaza en Rabat y para conocer las relaciones del país vecino con las comunidades islámicas locales volverán al cauce por el que discurrían antes de la constitución de la UCIDCE o no.

Menor dependencia

“No es que no queramos tener imames marroquíes, porque para las comunidades federadas no sería complicado contratarlos de otros países como el Reino Unido o islámicos”, puntualiza Maateis, “sino no depender de forma permanente de la Delegación de Asuntos Religiosos en Rincón”. Dado que la duración habitual de estos estudios es de entre cuatro y cinco años, Maateis calcula que en un lustro la cantera local podría dar al menos una decena de imames.

El máximo responsable de la UCIDCE no ha ocultado nunca su convicción de que, como españolas y ceutías que son, las entidades islámicas ceutíes “no tienen por qué” mantener relaciones de subordinación con el Habús marroquí. “A nosotros”, ha repetido siempre que se le ha preguntado al respecto, “nos ampara el Ministerio de Justicia y la Dirección de Asuntos Religiosos.

En Ceuta ejercen actualmente como imames aproximadamente sesenta personas. La mitad de ellos lo son principales en sus respectivos templos y menos de una decena perciben una minuta mensual de menos de cien euros del país vecino como funcionarios suyos. Sin embargo, el Reino alauita sí tiene la potestad, en cada emisión o renovación de sus pasaportes, de reconocerles o no como fakir, imam, memorizador del Corán o educador. De facto, dicha capacidad pone en sus manos la posibilidad de facilitar o no que sigan desempeñando un trabajo como tales, factor con el que según todas las fuentes consultadas se les presionó para boicotear la Musal-la de Loma Margarita.

El líder de UDCE, Mohamed Ali, tachó el pasado domingo de “inaceptables” dichas consignas y afirmó haber tratado ya con Vivas y Gordillo la conveniencia de promover la formación de imames ceutíes.
 

“Nadie va a cambiar el rito maliki porque nos parece lo mejor para Ceuta”

El Islam es una religión unitaria basada en cinco pilares básicos: el testimonio de fe en la Unidad Divina, las cinco oraciones diarias, el ayuno durante el mes de Ramadán, la contribución económica a la sociedad y la peregrinación a la ciudad santa de La Meca. Las fuentes de la religión y la jurisprudencia islámicas son, en primer lugar, el Sagrado Corán y después la Sunna, es decir, los dichos y actos del Profeta Mahoma recopilados a través de relatos llamados hadiz. A lo largo de la historia del Islam han sido varias las escuelas jurídicas que se han desarrollado. De ellas, cuatro conforman el mapa islámico sunní mundial actualmente, según explica el director de la página www.webislam.com, Yusuf Fernández: la Hanafi domina en Turquía, Siria, parte de Egipto, Asia Central, China y buena parte de Afganistán, Pakistán y la India. En Túnez tiene valor oficial junto a la escuela maliki y en Argelia existen algunos seguidores. El malikismo, del Imam Malik, fue la escuela jurídica más extendida en al-Andalus y en la actualidad es la de la mayor parte de los países del norte de África, excepto Egipto. También es la más implantada en el África subsahariana , quedando trazas de ella en el este de la Península Arábiga. La Shafi’i en la actualidad es mayoritaria en Egipto, África oriental, Indonesia, Malasia y en los núcleos musulmanes de Tailandia, Filipinas y Vietnam. Por último, la escuela hanbali tiene en la actualidad su mayor implantación en la Península Arábiga, donde sirvió de inspiración para el wahabismo, corriente ideológica surgida en el siglo XVIII que tiene hoy una influencia decisiva en el gobierno de Arabia Saudí, el cual ha tratado de exportar su ideología a lo largo y ancho del mundo islámico. Laarbi Maateis asegura que el hecho de que las universidades a las que la UCIDCE baraja enviar a los jóvenes ceutíes que así lo deseen estén en este país o Egipto no afecta a la corriente en la que se formarán, que según recalca “será siempre la maliki”. “Nadie va a cambiar eso, sobre todo porque nos parece que es lo mejor para la ciudad”, avisa sobre la sospecha que siempre sobrevuela a su federación.