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La plantilla de la UA Ceutí llevó a cabo ayer una intensa
sesión de entrenamiento en la que trabajó tanto los aspectos
físicos como los tácticos. Después de la derrota sufrida el
pasado jueves frente al Gasifred, el técnico caballa, Juanma
López, no quiere dejar ningún cabo suelto, por lo que
durante toda la semana ha estado llevando a cabo duras
sesiones de entrenamiento con el fin de afrontar con las
máximas garantías posibles el importante partido que mañana
lo enfrentará al Nazareno.
Después de los entrenamientos del lunes y del martes, y tras
la jornada de descanso del miércoles, los jugadores
unionistas regresaron ayer al trabajo con la idea fija de
que sólo vale ganar ante los jerezanos, que visitarán la
pista del Díaz-Flor heridos tras los malos resultados de las
primeras jornadas.
Los únicos jugadores que no se ejercitaron ayer con el resto
del equipo fueron Salvi y Yunes, que esperan a operarse de
sus respectivas lesiones de menisco para regresar a las
pistas cuanto antes. Mientras que Salvi pasará mañana mismo
por el quirófano, Yunes podría hacerlo durante la segunda
semana de octubre, estando alrededor de un mes de baja tras
la operación.
Por su parte, quien regresó a los entrenamientos ayer fue
André, que tras sufrir un pequeño esguince en su tobillo
izquierdo ante el Gasifred, no ha podido ejercitarse durante
toda la semana con el equipo. Aunque llevó a cabo la primera
parte de la sesión, el portugués no participó en el
partidillo.
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Entrenamiento
