Carlos Orúe reconoció ayer en su ‘encuentro’ con los medios
previo al choque contra el Granada en el Alfonso Murube que
“para nosotros la derrota en Sevilla ha supuesto un varapalo
porque era un campo que considerábamos asequible, pero los
filiales son equipos con mucha ilusión, le dejamos hacer y
perdonamos tanto en el inicio del partido con la oportunidad
de Aarón Bueno como en la segunda mitad cuando
desperdiciamos alguna ocasión muy clara”.
Oli manifestó que el Ceuta en la segunda parte se conformó
con el empate. A Orúe no le han gustado estas declaraciones
y cuando se lo comentaron soltó que “Oli puede decir misa”
para argumentar que “casi nunca me meto con lo que hace el
rival, pero el comentario de Oli me parece atrevido. Creo
que nunca dimos sensación de conformarnos con el empate y a
nadie se le escapa que el gol del Betis llega tras una falta
a favor en la que metimos todos nuestros efectivos en su
área. En la ‘contra’ cometimos una falta junto a su
banquillo, que el árbitro permitió al rival tirarla diez
metros dentro del campo cuando se produjo en la banda y acto
seguido pitó el penalti. No sé si ellos hicieron más méritos
que nosotros, pero para mí un empate hubiera sido más justo.
El Ceuta nunca renunció a ganar el partido porque este
equipo no se va a conformar con un empate”, subraya.
El entrenador del Ceuta admitió que “yo quedé muy disgustado
y los jugadores saben que estamos ‘enfrentados’ en estos
momentos. No estoy nada contento con el partido que se hizo.
Apostamos por futbolistas altos para ganar el encuentro a
través del juego aéreo, pero nos faltó decisión en los
remates. En la primera parte, con el viento a favor, nos
teníamos que haber metido en el campo contrario, pero para
hacerlo tienes que coger los rechaces y aprovechar las
segundas jugadas. En los balones divididos perdimos la
partida. En la segunda parte costaba más trabajo salir e
hice los cambios bastante pronto porque Raúl Martín y Aarón
llegaron los últimos y tienen que mejorar el físico”.
A Orúe no le hizo ninguna gracia que le dijeran que su
equipo está obligado a ganar este domingo. “Estamos en la
sexta jornada y queremos ganar todos los partidos. La Liga
consta de 38 jornadas y faltan aún 99 puntos”. El técnico
del Ceuta incide en que “queremos ganar siempre, pero
nuestra obligación es partirnos la cara en el campo para
intentar ganar, no nos pagan para ganar sino por
comportarnos como profesionales y por ‘rompernos’ la cabeza
en cada partido. Todos los equipos tienen la obligación de
ganar, pero sólo uno lo consigue”.
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