El presidente de la Comunidad Islámica de Ceuta, Ahmed
Hachmi Lamrani, acusó ayer a la UCIDCE de intentar
regularizar en la Delegación del Gobierno a sus espaldas a
dos fakih [auxiliares de imames] usando el nombre de la
entidad sin su permiso.
La Comunidad Islámica de Ceuta que preside Ahmed Hachmi
Lamrani anunció ayer que la entidad ha abandonado la Unión
de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE) que preside
Laarbi Maateis tras enterarse a través de la Delegación del
Gobierno de que esta federación había intentado regularizar
la situación en Ceuta de dos fakih marroquíes, Mohamed
Chakroun y Abdeslam El Bakali usando el nombre de su
asociación “a espaldas de nuestra representación legal”. A
través de un comunicado de prensa Lamrani explicó que la
UCIDCE había pedido a nombre de su comunidad sendos permisos
de residencia para estas dos personas “que realizan alguna
labor en el cementerio musulmán de Sidi Embarek”. “No
reclamamos ni nos hacemos responsables de los imames para
dirigir los entierros porque la Ciudad cubre las labores por
10 enterradres en el camposanto de Sidi Embarek”, ha
advertido Lamrani por escrito a la Oficina de Extranjería de
la Delegación.
Este periódico intentó ayer sin éxito conocer la versión de
los hechos de los máximos responsables de la UCIDCE.
|