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Las penas dictadas por la titular del Penal número uno
fueron de 420 euros al responder por un delito de daños y
una falta de lesiones, y 1.446 euros en concepto de
indemnización por los daños físicos y materiales producidos
al denunciante y su establecimiento.
A estas deberá hacer frente el acusado por los hechos
acontecidos en febrero de 2008, cuando fue a una
inmobiliaria ceutí para pedir una aclaración al propietario
de la misma sobre una compra.
Ante la negativa de este, el imputado comenzó a agredirle
causándole varias lesiones así como destrozos en el local
tales como la rotura de una mesa de cristal y un ordenador,
entre otros objetos y enseres.
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sentencia
