Los agentes de la Unidad de Intervención Rápida de la
Policía Local localizaron ayer a un joven de 17 años del que
sus familiares habían denunciado su desaparición el pasado
martes.
Se trataba de un menor de 17 años que vivía con su tía y con
una abuela y que en el momento de ser identificado señaló
que se había ido a vivir a casa de un amigo ante la desazón
de la familia que no tenía conocimiento de sus últimos
movimientos, ni había dado señales de vida.
Los funcionarios del cuerpo local de seguridad se percataron
de la entrada de un joven parecido a la descripción que
manejaban que entraba en un portal. Tras seguir sus pasos,
dieron con él en una azotea para desubrir, tras las
preguntas de rigor y su identificación, de que efectivamente
se trataba del menor que había desaparecido sin dejar más
rastro. De manera inmediata, los funcionarios contactaron
con los familiares que expresaron su satisfacción por la
labor policial. El menor ya está de vuelta a casa.
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