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Ceuta se agarra a la crin del europeismo más ecológico y
apuesta por la educación y concienciación con un primer
empuje para eliminar las bolsas de plástico. Será en
Navidad, hasta entonces la ciudadanía puede ir a
concienciarse al Eroski que apuesta por devolver un céntimo
por cada bolsa que no se utilice en la compra. Una inversión
de 6.000 euros inicia la lucha para desterrar a las bolsas
de plástico y contribuir al cuidado del ecosistema marino,
uno de los más afectados ya que en los fondos ceutíes hay
miles de bolsas en descomposición.
La ciudad lo advirtió en un pleno en el que la oposición
pidió explicaciones sobre la aparente pasividad de la
Consejería de Medio Ambiente en el tema de las eliminación
de bolsas de plástico. El gobierno trabaja en el tema y los
resultados serán palpables en Navidad. Estaba por entonces
perfilando un plan de actuación que ya está prácticamente
resuelto. La Consejería de Medio Ambiente ultima una campaña
con el objetivo de concienciar a la ciudadanía sobre el tema
y en la que invertirá aproximadamente 6.000 euros en la
fabricación y reparto a empresarios ceutíes de unas 2.500
bolsas reutilizables. “Que mejor época, aprovechando el alto
índice de consumo de esas fechas”, explicó la consejera al
respecto de una iniciativa que requiere la implicación de
los comerciantes .
Concienciar a la ciudadanía
Será el Centro Comercial Abierto el que coordine una campaña
que tiene por objetivo prioritario “concienciar a la
ciudadanía y al empresariado en concreto del uso de este
tipo de bolsas”, explica la gerente de la asociación, Pilar
Carrasco. En concreto se prevé el reparto de bolsas de
fécula de patata que al ser biodegradables tardan en
desaparecer 180 días frente a los 400 años que tarden las
tradicionales bolsas de plástico. También se está estudia el
reparto de las que son reutilizables “pero aún lo estamos
perfilando, al igual que el diseño”, apunta Carrasco. Lo que
es seguro, es que los presupuestos que se están analizando
deben pedirse a empresas de fuera de Ceuta porque “aquí
ninguna se dedica a fabricar este tipo de bolsas”. Y uqe las
bolsas llevarán el distintivo del “Centro Comercial
Abierto”.
Este es un primer paso para la consejería, siempre
anteponiendo que se trata de promocionar el uso de este tipo
de bolsas. “Nosotros simplemente vamos a ayudar a crear
conciencia ecológica y la primera de las actuaciones será
esta”, apunta Bel. El siguiente paso vendrá reflejado con
una partida específica en los presupuestos del próximo año
en el que la consejería se ha comprometido a seguir las
directrices europeas y procurar que el consumo de bolsas de
plástico se reduzca a la mitad.
Reducir a la mitad en un año
La Unión Europea ha sido tajante: España debe tomar nota
especialmente porque cada habitante usa 238 bolsas lo que
sitúa al país en el tercer puesto en el ránking de este
consumo. Ceuta cumple con las estadísticas y hay que darse
prisa para posicionarse dentro de las directrices apuntadas
desde Bruselas.
El Estado ha fijado el compromiso de reducir al 50 por
ciento las bolsas de plástico a partir de 2009 y de tener en
vigor en 2010 una normativa mediante la modificación de la
ley de envases y de la ley de residuos. Se aprovechará para
ello la trasposición de la directiva marco de la Unión
Europea, por la que habrá que introducir unos cambios en la
normativa nacional para la progresiva retirada de las bolsas
de plástico. Los ecologistas recuerdan la necesidad de que
Ceuta cuente ya con un Plan de Gestión de Residuos que
contemple, “entre otros asuntos indispensables, la puesta en
marcha de los contenedores amarillos destinados a
plásticos”.
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Objetivo: concienciar para el principio del fin de estos
residuos
238 bolsas de plástico al año por
persona dan para asfixiar a muchas tortugas marinas, para
milenios de años en descomposición entre los tesoros
submarinos y para un cajón vacío en cada hogar. Un cambio
fácil porque esas decenas de bolsas acumuladas pueden
sustituirse por una sola que no contamina. Pero lo más
complicado es crear conciencia, en lo que se centrarán desde
la consejería de la Ciudad. Se trata de una campaña
“necesaria, más áun en Ceuta, rodeada de litoral y de unos
fondos marinos únicos entre los que se esconden miles de
bolsas de plástico que los destruyen poco a poco”. Los
ecologistas ven bien “un primer paso sobre el que se tiene
que seguir trabajando”. Manos a la obra.
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medio ambiente
