Tras mucho tiempo sin asistir a la
tertulia que habitualmente desarrollamos en el Casinet,
acudo esperanzado de encontrar a algunos de mis compañeros.
Sólo están sentados en el velador dos tertulianos, del resto
ni tienen noticias ni saben donde están.
Uno de ellos estaba hablando del Barça y su fantástico
camino en pos de títulos con una formación barata si tenemos
en cuenta la cantidad de jóvenes procedentes del equipo B.
No podía faltar la comparación con el R. Madrid y el
desembolso realizado para formar la plantilla.
Cuando me siento a la mesa con ellos se cambia el tema de
conversación y se pasa a debatir la actualidad política.
Comento la noticia de que en Marruecos ha aparecido un grupo
musical de raperas. Me responden, los dos tertulianos, que
eso me lo acabo de inventar. Que es totalmente imposible que
en Marruecos las mujeres se independicen hasta ese grado,
porque sigue siendo una sociedad profundamente machista y
conservadora.
Trato de hacerles comprender que Marruecos está cambiando
poco a poco y que permite ciertas libertades… no se lo
creen.
Pasamos al tema de las bombillas, las que iluminan no las
que explotan, en que irán desapareciendo del mercado las
incandescentes porque los fabricantes han dejado de
servirlas.
Remato en que aparte del cambio de las incandescentes habrá
un nuevo cambio esta vez referido a las plantillas de las
fábricas de bombillas y lámparas. Me preguntan qué cambio
puede haber y les respondo que al cambiar las bombillas por
fluorescentes y compactas de bajo consumo, les resultaría
muy caro comenzar un proceso de fabricación nuevo por lo que
lo mejor para los fabricantes es importarlas de China y
recolocarlas como suyas. Ello se traduce con una reducción
sustancial de las plantillas de obreros.
Me tachan de agorero. Al tiempo.
Hablamos de los Ayuntamientos que están comenzando a
desinflar totalmente sus arcas, Ayuntamientos que gritan
socorro.
Los ingresos municipales han menguado bastante en sus dos
vertientes: los propios derivados del sector inmobiliario y
las aportaciones del Estado con los que los sitúan en
posición de quiebra técnica si no lo solucionan antes.
Opino que los ediles se pasan de la raya marcada por la
moderación en referencia a sus sueldos y dietas. No me
extrañaría que algunos Ayuntamientos apliquen ERE a sus
empleados, del que estarán totalmente exentos sus ediles
políticos.
Seguimos platicando y salto en un momento determinado con
“la trama del PP”. Me responde uno que no se dice así, que
se dice “trama contra el PP” Insisto en que anda equivocado,
que me refiero a la trama de corrupción del PP. Es del PP y
de nadie más. Lo contrario no es más que una banalidad y una
mentira.
Volvemos al tema del fútbol, la morbidez del argentino Jorge
Valdano no tiene límites. Sus declaraciones de que el Barça
mira para dentro de Catalunya y el Madrid hacía fuera del
Estado no puede ser otra cosa que la mayor imbecilidad
formulada por un ser humano. Se olvida este señor que los
“culés” somos los únicos en España que pueden circular con 5
copas de más y nadie nos puede multar.
Suerte tenemos los “culés” de no disponer en el “staff”
barcelonista de gente tan ignorante y morbosa como ese señor
de verbo fácil.
La vida sigue, el barman no para de servir bebidas; el
camarero continua su trajín con la bandeja; el marmitón
espera a que se acaben las tapas de la vitrina para
reponerlas mientras el sol, afuera, vagabundea con sus
últimos destellos antes de hundirse en el Atlántico para
iluminar las tierras del continente americano. El ocaso no
es bello a causa de los edificios con los pelos de punta
(las antenas) que taponan la vista.
La vida sigue con sus amores y sus odios, sus trabajadores y
sus parados, mientras los ricos son ricos cada vez más y los
pobres siguen siendo pobres porque no pueden serlos más.
Yo sigo mi camino hacía el agujero negro que nadie puede
saber jamás cuándo se abrirá a mis pies.
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