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La consejera de Sanidad ceutí
asistirá hoy en Madrid al cuarto Consejo Interterritorial
del Sistema Nacional de Salud dedicado al seguimiento y
análisis de la pandemia de gripe A, un asunto sobre el que
hasta ahora los políticos habían mantenido un consenso casi
unánime pero que con la apertura del nuevo curso parece
haberse roto.
Con el otoño a la vuelta de la esquina la cita de esta
mañana debe ser, a la luz de los asuntos que se abordarán,
crucial para conocer con qué grado de preparación se
enfrenta España y las distintas Autonomías al periodo en el
que se supone que puede dar pie al mayor número de
contagios.
Definir los grupos de población que serán inmunizados cuando
esté lista la vacuna, unificar los protocolos de actuación
en colegios y otros lugares públicos, establecer unos
criterios concretos para la asistencia sanitaria para evitar
colapsos y estudiar el posible retraso del curso escolar son
los asuntos incluidos en el Orden del Día del encuentro.
Hasta la fecha las autoridades sanitarias han sabido
gestionar la llegada del nuevo virus con relativo éxito. En
Ceuta sólo han sido dos los casos confirmados y, pese a la
expectación generada alrededor de ambos, los mensajes de
todos los agentes implicados y especializados llamando a la
ciudadanía a la calma han sido fundamentales para no desatar
la alarma entre los ceutíes.
Un episodio de alerta desmedida sólo contribuiría a empeorar
la situación pues, como ya se ha advertido en reiteradas
ocasiones, los servicios de atención médica no están
capacitados para atender una demanda exagerada y no
justificada que en el mejor de los casos no haría sino
retrasar la asistencia a quien sí la necesite realmente.
Por ello es importante que las autoridades mantengan
informada de forma rigurosa a la ciudadanía, para que esta
sepa cómo cuidarse a sí misma primero y, después, si contrae
la gripe, qué hacer y qué no hacer para superarla de la
mejor manera posible.
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OPINIÓN / EDITORIAL
