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Cuando el Club Náutico de Estepona decidió poner en marcha
la Ruta de los Fruteros, nunca pensó que iba a tener tanto
éxito. El puerto deportivo del municipio marbellí necesitaba
tener más vida, un impulso a sus actividades cotidianas que
permitiera a los socios seguir disfrutando del mar con la
compañía de los integrantes del club y nuevas distracciones.
Y qué mejor que aunar ocio con tradición, historia y
turismo. Intentarían recuperar la conocida como Ruta de la
Fruta en la que los comerciantes de Estepona, Ceuta y
Marruecos, intercambiaban mercancía allá por principios del
siglos XVIII. Unos traían fruta, otros llevaban salazón a la
península y todos atravesaban el Estrecho como medio de vida
intentando, en ocasiones en vano, que la mercancía llegara
siempre a buen puerto. Los piratas eran la barrera
cotidiana. Algunas veces se esquivaban y otras no.
Los que recuerdan aquellas hazañas, ahora esquivan
simplemente el aburrimiento y la rutina. “Es el tercer año
que participamos en la Ruta de los Fruteros, desde que se
inició y el ambiente es muy bueno, navegar por estas aguas
también es increíble y todo está saliendo inmejorable”,
explica uno de los participantes, que es a su vez
vicepresidente del Club Náutico de Estepona y promotor de la
idea, Antonio Simón. “Somos 17 embarcaciones y un centenar
de personas”. En su mayoría de Estepona, pero los hay de
otros lugares. Miguel ha venido con su padre y han sido los
primeros en llegar al puerto ceutí. Tardan cuatro horas
largas en hacer el recorrido con su velero de segunda mano
que adquirieon por algo más de 20 millones de las antiguas
pesetas. “No es para ricos”, comentan varias mujeres de los
participantes más veteranos. “Es para jubilados...y si no
tienes embarcación, vas con los amigos, lo importante es
disfrutar del mar”.
Escala en Marruecos
Disfrutar del mar, del compañerismo, de la ruta y del
turismo. Este año, por primera vez han explorado la ruta que
hacían los fruteros que llegaban a Marruecos. Han atracado
en M’Dic, en Marina Smir en un puerto “muc ho más sucio que
el de Ceuta, las cosas como son”. Pero con un recibimiento
“extraordinario” donde las autoridades les han mostrado la
tradición más ancestral de la cultura bereber, les
ofrecieron una cena de gala en un palacio, viajaron también
hasta Chaouen para conocer uno de los pueblos más
pintorescos... y pasaron a la siguiente escala ya en Ceuta.
Comenzaron a gotear a medida que iba pasando la mañana para
reunirse todos juntos finalemnte al medio día y disfruta rde
una ‘meridiana’, esto es, una copa tal y como hacían
antiguamente los marines cuando llegaban las 12:00 tal y
como calculaban por los rayos del sol.
Luego la ciudad les ha ofrecido una visita turística y
tendrán además una cena con entrega de placas a tdas las
embarcaciones participantes. De motor y velero. Las de motor
más rápidas, las de velero más seguras”.
“El velero corta las olas y no va votando sobre ellas como
hacen las embarcaciones a motor”, explica Miguel Núñez junto
a su hijo. Estrenó el velero navegando hasta Ceuta hace
cuatro años y no se cansa de él. Ni de él ni de Ceuta. Cree,
al igual que la mayor parte de sus compeñeros de ruta, que
Ceuta tiene mucho que aportar al mundo de la náutica en la
zona e incluso en el país. La Ciudad lo intenta al menos,
pendiente de consolidarse como una Estación Náutica que de
empuje a un sector por el que se tienen muchas esperanzas de
que inyecte energía al motor económico ceutí. Este tipo de
eventos, no sólo han traído a un centenar de turistas a la
ciudad, si no que consolidan el puerto deportivo como un
lugar indispensable para atracar al otro lado del Estrecho.
Más de 300 amantes de la náutica tienen sus embarcaciones
atracadas en un puerto “coqueto, limpio y muy a mano de
todo”, atl y como explican los que disfrutan de sus
instalaciones. Hay cosas por mejorar, pero de momento se ha
hecho indispensable para todos los participantes en la Ruta
de los Fruteros, recalar en Ceuta al menos una vez al año
para disfrutar de su foso, sus playas, su comida y su vida.
“Navegar es vida y Ceuta también lo es”.
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“Ceuta tiene un puerto deportivo limpio, con
un foso único y una comida estupenda”
Todos coinciden e intentan alargar
la estancia en Ceuta siempre quepueden. El nombre del puerto
deportivo comienza a sonar con fuerza entre los amantes de
las embarcaciones y los integrantes de la III Ruta de
Fruteros son ya conocedores de la Ciudad. Dicen que el lugar
está bien, que es estupendo, que se les dá facilidades
“permitiéndonos atracar prácticamentegratis”, que se está
trabajando por impulsar este tipo de turismo y se nota, pero
que “no todo es perfecto y hace falta mejorar los
servicios”. De los participantes locales la opinión es
similar. Consideran que Ceuta es un enclave privilegiado
pero solicitan más ayuda de la administración para impulsar
definitivamente este tipo de eventos “tanto que están
promocionando el turismo náutico”.
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TURISMO NÁUTICO / III EDICIÓN DE
LA RUTA DE LOS FRUTEROS
