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La selección española juvenil terminó en la octava posición
el Campeonato del Mundo después de perder en la última
jornada contra Australia. El equipo de Lorena Miranda
acarició el pase a las semifinales, pero cedió ante Hungría
en la prórroga cuando en el tiempo reglamentario pudo lograr
la victoria si el último lanzamiento no se hubiera
estrellado en la madera. España acusó el golpe y en la pelea
por la quinta plaza no pudo ni con Italia ni con Australia,
dos selecciones ante las que ya había caído en la primera
fase en el grupo ‘B’.
El cuadro de Claudio Camarena sucumbió por 11-6 ante las
‘aussies’ con los siguientes parciales (3-1); (3-4); (3-1) y
(2-0). El partido no arrancó bien para las españolas, pero
reaccionaron en el segundo periodo marchándose al descanso
uno abajo (6-5). En la segunda parte España estuvo espesa en
ataque al conseguir un solo gol y facilitó el triunfo de
Australia.
En la final Rusia, selección anfitriona, hizo bueno el
pronóstico tras derrotar a la sorprendente Holanda por 14-9.
Estados Unidos conquistó el bronce ante Hungría (11-8).
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