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Fueron muchas horas de trabajo, muchos puntos de consenso y
mucha ilusión en configurar un documento que recogiera los
puntos claves para abordar la problemática medioambiental de
Ceuta. Dos años después de ese trabajo apenas se han
cumplido un par de puntos y el documento “parece olvidado
por el Gobierno”.
Incluso el Ministerio se ofreció a firmar un convenio para
que se pusiera en marcha el trabajo del informe con sus
pertinentes planes de actuación para cumplir con cada
acuerdo. Pero “no entendemos porque finalmente el gobierno
local mostró una actitud pasiva y poco coherente”, explica
la asociación Septem Nostra’. El presidente de la entidad,
José Manuel Pérez Rivera, defiende la crítica con argumantos:
“Es poco inteligente que teniendo este documento tan
importante y que tanto trabajo costó redactar consensuado
entre todas las partes no se ponga en marcha”. Desde
asociaciones ecologístas, pasando por todos los partidos
políticos, sindicatos y el propio gobierno de la Ciudad que
se comprometió a que la Consejería de Medio Ambiente llevara
adelante el plan en la medida de sus posibilidades que no
han sido muchas dos años más tarde.
Las cosas de palacio van despacio y en lo que se refiere a
la puesta en marcha de un plan para los residuos que generan
los habitantes de la ciudad, se ha sellado el vertedero de
Santa Catalina, se ha puesto en marcha un punto limpio, pero
aún queda mucho trabajo que hacer en este sentido. Lo
primero, la redacción del plan y la decisión de que tipo de
planta de residuos se adoptará. La Ciudad trabaja en ello.
Pero “no es suficiente”. La Agenda recoge desde la
protección, conservación, recuperación, gestión, difusión y
aprovechamiento sostenible del patrimonio natural marino de
Ceuta, hasta la creación de una oficina de información
ambiental, la potenciación de las energías renovables,
fomento del transporte público, buenas prácticas ambientales
para las empresas, PGOU basado en parámetros de calidad
ambiental, ... y muchos otros puntos. Recientemente, Los
Verdes solicitaban que parte de los fondos europeos se
destinaran a la puesta en marcha de la Agenda 21. Desde
Septem Nostra el gobierno “debe ponerse manos a la obra ya”.
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El papel de los políticos es “clave” en el documento y “no
invisible”
Una de las premisas de la Agenda
21 pasaba por exigir a los políticos mayores cuotas de
acercamiento, transparencia y compromiso político, así como
la capacidad de denunciar a los grupos de poder que atenten
contra el desarrollo sostenible. La Agenda solicitaba además
conciencia de realidad social y visión de la ciudad en su
conjunto, huyendo de la permisividad política y falta de
exigencia en sus competencias. Y un punto clave es el de que
los representantes políticos trabajen en incentivar la
participación de las fuerzas sociales y la cooperación
institucional con las entidades públicas y privadas en pro
de la igualdad entre géneros. Asimismo, se propuso la
instauración de la figura del Defensor del Ciudadano para
que existiera una figura concreta en la que recayera
cualquier queja al respecto en este aspecto.
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medio ambiente
