La práctica paralización del mercado inmobiliario local está
provocando una situación atípica: que viviendas de nuevas
promociones presentan a día de hoy un precio bastante más
bajo que otros inmuebles de segunda mano ofertados. El
motivo: las promotoras han puesto un precio más asequible
para que las nuevas viviendas tengan salida en el mercado,
mientras que muchos de los propietarios de pisos en venta no
puede rebajar más el precio ya que en su día se compró muy
alto, y por lo tanto la cuantía de la hipoteca es muy
elevada.
A pesar de que hay muchas personas que están esperando a que
los precios de las viviendas bajen algo más para poder
comprar, muchos de los actuales propietarios que tienen su
inmueble en venta no puede colocar un precio más bajo de lo
que ya la ofertan. Y es que de hacerlo hasta los niveles que
exige la demanda, en algunos casos, se encontrarían con una
venta por debajo del montante que supuso el precio por la
que se compró la vivienda, los intereses de la hipoteca y la
cuantía resultante de la cancelación del crédito.
Esto ha provocado que en muchos casos sea más aconsejable
adquirir una vivienda de reciente construcción. "Los pisos
de nuevas promociones han bajado muchísimo. En algunos el
precio ha caído 18.000 ó 24.000 euros", asegura Yolanda
Sánchez Torres, de la inmobiliaria Global, sobre un descenso
que se ha comenzado a notar desde que comenzó el año.
Según explicó a MELILLA HOY, a día de hoy existen pisos de
tres dormitorios que están a la venta por unos 180.000
euros. Sin embargo, viviendas que se acaban de construir con
un tamaño similar en una misma zona pueden costar en torno a
170.000 euros.
Otro ejemplo es un ático de segunda mano, en el barrio del
Real, con tres dormitorios y dos cuartos de baño, cuyo
precio es de 270.000 euros, mientras que un inmueble similar
de una reciente promoción puede rondar los 215.000 euros.
120.000 euros de partida
En cuanto al resto de precios, como apunta la cuantía
habitual de una vivienda de 2 dormitorios está a día de hoy
se encuentra entre los 120.000 y los 125.000 euros, sobre
todo en zonas como el barrio de la Libertad, Real o
Tesorillo. Eso sí, en la gran mayoría de los casos se
estaría hablando de viviendas sin trastero ni plaza de
aparcamiento, ya que ello incrementaría el precio en unos
15.000 euros.
Si lo que se pretende es adquirir una vivienda de 3
dormitorios -igualmente sin trastero ni garaje- el
desembolso mínimo rondaría los 150.000 euros en el caso de
una vivienda de en torno 80 metros cuadrados, mientras que
esta cuantía se acercaría a los 170.000 euros si el inmueble
cuenta con 90 metros.
Industrial, mayor movimiento
Lógicamente también incrementa el precio la zona donde se
viva, ya que en el Industrial a día de hoy una vivienda de
nueva construcción de tres dormitorios se encuentran a
partir de los 180.000 euros
Precisamente, esta parte de la ciudad es en la que se están
percibiendo un mayor movimiento del mercado inmobiliario,
como recuerda Guadalupe Miranda de la inmobiliaria Unicasa.
De todas formas, como también señala aún siguen siendo
muchas las personas que se están encontrando con muchas
dificultades para suscribir una hipoteca
De hecho, según apunta apenas son 5 ó 6 personas las que
cada semana se acercan por la inmobiliaria preguntado por
una vivienda, de las cuáles tan sólo 1 ó 2 tienen firme
intención de comprar.
En lo que si han experimentado un mayor incremento de
clientes ha sido en aquellos interesados por el
arrendamiento. "De cada 15 personas que entran preguntado
por una vivienda, 14 lo hacen para un alquiler", asegura.
|