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La Policía Nacional ha clausurado a mediados de esta semana
un comercio del Real denominado “Buena Gente”, situado en la
calle Legión, después de que los tres hermanos que atendían
el negocio fueran detenidos el pasado 16 de julio acusados
de venta de cocaína. Las puertas de la tienda, que se
dedicaba además de a la venta de alimentos, artículos de
limpieza y bebidas, también al cambio de dinero, están
precintadas y con carteles de la Unidad de Droga y Crimen
Organizado (Udyco).
Un portavoz de la Jefatura Superior de Policía comunicó que
la Brigada de Policía Judicial detuvo a estas tres personas,
como presuntos autoras de un delito contra la Salud Pública.
Los tres arrestados son además hermanos, M.M.M., M.M.M. y
A.M.M. de 45, 40 y 36 años respectivamente, españoles,
naturales y vecinos de Melilla, a los que se acusa de
controlar la recepción, distribución y venta de la droga en
su comercio, cuyas ventas se realizaban a lo largo del día.
Las investigaciones comenzaron el mes de junio, cuando la
Policía tuvo conocimiento de que en un comercio de la calle
La Legión, llamado 'Buena Gente', se vendía droga, en
concreto cocaína, a numerosas personas.
Concluido el período de investigación y una vez
identificadas las personas y su "modus operandi", los
agentes dispusieron, siempre con la supervisión judicial, el
operativo policial.
Y fue el pasado 16 de julio a las 17 horas cuando, con la
preceptiva orden judicial, procedieron al registro del
comercio, dando como resultado la incautación de 50 gramos
de cocaína, una parte distribuida en bolsitas y listas para
su distribución y venta, así como de 4.900 euros, y la
detención de M.M.M., M.M.M. y A.M.M.
La droga y dinero incautado junto a los detenidos, pasaron a
disposición judicial, que decretó los ingresos de los tres
en prisión.
La Policía solicitó además la clausura del establecimiento
comercial, una petición que ha sido atendida tres semanas
después de que el pasado jueves 16 de julio se cerrara la
tienda por orden del juez que lleva el caso, hasta que se
decida su reapertura, una vez aclarado este asunto de
presunta venta de drogas a pequeña escala.
Una portavoz de la Policía Nacional aseguró que con el
avance de la investigación pudieron comprobar que en dicho
local comercial destinado a la venta de comestibles,
"estaban al frente del mismo tres hermanos y que para la
venta de la droga, habían incluido varias contraseñas, como
el pedir un paquete de pañuelos de papel y otros, que
identificaban a los compradores". En la imagen, un agente
con uno de los detenidos el 16 de julio.
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