Carlos Chocrón y Manuel Carrera tienen en común una gran
amistad y unión, vinculada a estrechas colaboraciones
profesionales en los últimos años. Pero también les une una
pasión, la plena dedicación a su profesión de orfebres.
Con la exposición “Joyas Escultóricas” de Manuel Carrera que
se presenta en Ceuta con el patrocinio de Chocrón Joyeros,
se acerca a los visitantes esta original obra.
Esta exposición ha estado dividida en dos fases. La primera
tuvo lugar del 15 al 21 de julio en la Boutique Chocrón,
pasando el día 22 al Museo de Ceuta, en el Paseo del
Revellín, donde seguirá abierta hasta el próximo día 16 en
su horario habitual.
Esta exposición representa la expresión de un concepto
singular realizado sobre la base de un estilo de joyería
inusual, con gran domino de los detalles.
Ya sean de inspiración mágica o mitológica, de
representación onírica o simbólida, sus creaciones son
elaboradas a partir de configuraciones de plata y oro que
contrastan y se funden con complejas estructuras de
minerales que se encuentran en su estado natural o
magistralmente talladas por el autor.
La historia de Manuel Carrera se sintetiza en la cuarta
generación de una familia dedicada por completo a la
orfebrería y joyería.
Manuel es el punto y aparte de una dinastía que despunta con
luz propia debido a su genialidad en todo lo que emprende.
Su aprendizaje lo realizó en el taller del maestro mayor del
Gremio de Joyeros y Plateros de Madrid, Ignacio Ruiz de la
Rosa, pasando posteriormente por la Escuela de Joyería de
Madrid. Cuando montó su primer taller, en su casa familiar,
trabajó para las primeras joyerías de la época, mediados del
siglo pasado. Ya en los años sesenta logró crear la firma
Carrera y Carrera, con una andadura ya en independencia
junto a otros socios.
En la producción de los objetos artísticos que se exponen
estos días en Ceuta se utiliza plata y oro, diamantes y
pedrería, además de materiales como fluorita, malaquita,
amatista, cristal de roca tallado y algunas piedras
semipreciosas.
Se trata de una aportación espectacular a la orfebrería
actual, que ha revolucionado su producción a nivel
internacional en la sustitución de pedrería tallada por
estructuras que aprovechan la forma natural del mineral en
piezas de orfebrería, esculturas y objetos clásicos.
En su obra se percibe una inquietud por hallar el vacío,
indagando en las entrañas de las piedras para buscar el
espacio y conjugarlo en el resultado final de la obra.
En estas esculturas se reinventa el expresionismo desde el
respeto a los materiales, conjugando los materiales de
manera que se indaga en la propia esencia de la naturaleza
para pulir lo necesario, pero preservando la propia
orografía de sus texturas. Así se llegan a estas
joyas-escultura de gran belleza y sorprendente
configuración.
Es una exposición que merece la visita porque todo lo que
allí encontrará le va a sorprender, por sus materiales, por
su configuración y por su belleza e imaginación.
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