Hoy penúltimo día de feria y, por
supuesto, hay que aprovecharla a tope para mañana, con dolor
de corazón, decirle, hasta el año que viene. La vida es así,
todo tiene un principio y un final. Y ese final aunque no
queramos termina por aparecer, como es el caso de la feria
donde, mañana con la traca final, tendremos que decirle
nuestro adiós.
Por supuesto cada uno contará la feria como le haya ido.
Unos con más suerte y otros con menos suerte, habrán surgido
enfados entre parejas y nuevas parejas que se habrán
formado. Por esa simple razón, cada uno contará de forma
diferente la feria, aunque todos coincidirán que lo han
pasado bien, que es lo más importante, porque los enfados
pueden ser simplemente una nube de verano, que en par de
días desaparecerá..
Algunos nos habremos olvidado de algo, que lamentamos
profundamente, por ese olvido involuntario que hemos
cometidos. Uno de esos que olvidaron algo de lo ocurrido en
la feria somos nosotros. Cosa que lamentamos profundamente.
Y por ello pedimos disculpas.
Cuando el día de la inauguración del alumbrado del recinto
ferial, le comentábamos a ustedes, todas las personas que
habíamos tenido la oportunidad de saludar. Pero en ese
recorrido nos olvidamos inconscientemente, cosa que
lamentamos profundamente, de que otras de las personas a la
que habíamos tenido la oportunidad de saludar, era a
Carracao.
A Carracao nos lo presentó, en el Murube, Sergio Moreno,
hablamos como par de minutos y ya no le volvimos a ver hasta
meses más tardes a la altura del Ulises, donde nos volvimos
a saludar, a penas sin intercambiar palabras. Así que cuando
la cuestión del encendido del alumbrado del recinto ferial,
sentí la satisfacción de poder volver a saludarlo.
En algunas ocasiones he escrito algo sobre él e incluso me
permití el lujo de hacerle alguna recomendación después de
su triunfo en la barriada del Príncipe. Naturalmente sólo
fue una simple recomendación de los pasos, que a mi juicio
debería seguir, con vista a las próximas elecciones.
Carracao es un hombre joven, inteligente y bien preparado. Y
la juventud ¡divino tesoro!, tiene esa fuerza interior que,
en ocasiones, les hace ser impulsivos, no pensando mucho
algunas de las repuestas, a determinadas preguntas o
acontecimientos. Son los gajes de la juventud, pero que con
el tiempo, como hombre inteligente que lo es, irá limando
todas esas cosas, que dejándose llevar por la impronta de su
juventud le puede llevar a equivocarse.
Tiene un brillante porvenir político y un gran trabajo que
realizar, para conseguir que su partido recupere el terreno
perdido, Creo, con toda sinceridad, tiene todos los
ingredientes necesarios para conseguirlo, llevando a su
partido al lugar que por derecho propio le corresponde.
En sus manos está el conseguirlo y de hecho se está notando
su presencia al frente del PSOE ceutí. Y como dicen que sabe
más el diablo por viejo que por diablo no te olvides nunca,
ante la duda, de contar hasta tres.
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