José María Jiménez, veterinario, desde que tenía seis años
de edad decía que quería serlo. Una vocación que le viene
desde siempre y que desarrolla todos los días en la clínica
de Real 90, donde hay de todo: quirófano, sala de Rayos X,
análisis, ecografías... hasta peluquería para poner guapas a
las mascotas. Es un apasionado de su profesión y se le nota
en cada frase que pronuncia y no se queja de los mordiscos
que le han dado. Son gajes del oficio.
La aparición de un perro trasfronterizo con positivo en la
rabia ha ampliado la vacunación de animales hasta
septiembre. Se calcula que cuando finalice, habrán inoculado
seis mil dosis repartidas entre perros, gatos, hurones y
caballos.
Pregunta.- En estos momentos continúa en marcha la campaña
de vacunación antirrábica. ¿Cómo se está desarrollando?
Respuesta.- La verdad es que bastante bien. Lo normal es que
por estas fechas hubiera terminado, pero ha habido una
ampliación hasta septiembre.
P.- Esto es por un caso de rabia que apareció en un perro
por la frontera, ¿no?
R.- Sí, hubo un caso de rabia que dio positivo y se ha
prolongado hasta el 15 de septiembre. Se está desarrollando
con mucha tranquilidad y de forma ordenada porque la mayoría
de propietarios de mascotas ya han procedido a la
vacunación, atendiendo a que normalmente finaliza con el mes
de junio, aunque eso no quita que de vez en cuando aparece
alguno para actulizar la vacuna de su animal de compañía.
P.- ¿Qué se vacuna? ¿A qué animales afecta?
R.- A perros, gatos y hurones, aunque en esta campaña
también se está vacunando a todos los equinos.
P.- ¿Cuántos caballos hay en Ceuta?
R.- Pues, bastantes. Exactamente no sabría decir a cuanto
asciende el censo porque se renueva cada año, pero nosotros
solemos gastar una media de mil cuatrocientas a mil
quinientas dosis por campaña. Contando que en la ciudad hay
cuatro centros veterinarios autorizados, y que unos vacunan
algo más que otros, pienso que se pueden rondar entre cinco
mil y seis mil animales en total entre los animales de
compañía y caballos.
P.- Porque, hay otros animales que la gente compra como
mascotas que no contraen esa enfermedad, ¿no?
R.- Sí, los animales exóticos no tienen obligación de estar
vacunados contra la rabia.
P.- ¿También son animales que pasan por la consulta
veterinaria?
R.- Sí, aparecen por aquí todo tipo de bichos. La verdad es
que no somos especialistas en animales exóticos, y los
atendemos en la medida que está dentro de nuestras
posibilidades. Si conocemos la patología, lo tratamos, y si
no ocurre así, hacemos interconsultas con otras clínicas
veterinarias.
P.- ¿Una clínica veterinaria está preparada para cualquier
tipo de contingencia?
R.- Efectivamente, presumimos de tener una clínica
suficientemente dotada, con aparato de Rayos X, ecografías,
monitorización avanzada anestésica -que es una novedad que
hemos incorporado en los últimos dos meses- que son
monitores que durante la anestesia del animal en una
operación controlan los niveles de frecuencia cardíaca,
saturación de oxígeno, presión sistólica y diastólica y
media; también un equipo de anestesia inhalatorio;
laboratorio que nos permite hacer hemogramas y estudios
bioquímicos, un autoclave para esterilizar todos los
instrumentos. Es como un pequeño hospital para animales
donde también tenemos una sala de hospitalización. Ah, y
también tenemos peluquería.
P.- Este nivel no se logra de una vez. Se nota que hay que
trabajar mucho para llegar a tanto. ¿De qué manera?
R.- Somos punteros en este sentido en Ceuta porque nos hemos
preocupado de no dejarlo estar e intentar ir mejorando,
adquiriendo nuevos aparatos y asistiendo a cursos.
P.- ¿Cuando comenzó esta andadura?
R.- El uno de noviembre de 1993, desde ese día estoy al
frente de la clínica veterinaria de Real 90. En aquella
época comenzamos en un pequeño consultorio, también en este
mismo patio interior, en unos cinco años ya nos mudamos al
actual local, con una superficie de cien metros cuadrados,
donde podemos tener de todo.
P.- Hablando del quirófano, ¿qué intervenciones son las más
frecuentes?
R.- Se practica mucha cirugía genito-urinaria, como
castraciones en los machos, ovariohisterectomía en del de
las hembras, como medida de control de natalidad, aunque
también existen patologías que necesitan intervenciones de
útero o de vejiga urinaria. También se hacen de cualquier
tejido blando como en el intestino cuando hay obstrucciones
por cuerpos extraños.
P.- ¿Qué ocurre si se daña un hueso la mascota? ¿Se dan
estos casos?
R.- También trabajamos en colaboración con otros centros
veterinarios, incluso de la península, que se desplazan a
esta ciudad para practicar traumatología o endoscopias. Son
especialidades más concretas.
P.- ¿Hay algún seguro que cubra las atenciones sanitarias de
mascotas?
R.- Nosotros no hacemos seguros médicos de manera directa,
pero hay algunas compañías que sí lo contemplan. MAPFRE, por
ejemplo, lo tiene y nosotros somos centro asociado. Esto,
como todo, tiene ventajas e inconvenientes. Pagas una
anualidad y te despreocupas. Si tu mascota es un animal sano
y no enferma, pasa como con todo, como si tienes el coche a
todo riesgo y no tiene ni un arañazo a lo largo de la
póliza.
P.- Desde que se implantó el sistema de control con
microchip, ¿qué ha ocurrido con los animales callejeros?
R.- En Ceuta hay un problema grave de presencia de gatos
callejeros, principalmente. Sería conveniente actuar en este
sentido. Yo sé que desde el Ayuntamiento se hacen recogidas
de estos animales, pero no es suficiente, sigue habiendo
demasiados por la ciudad. El hecho de que haya gatos por la
calle sin estar esterilizados y con la facilidad con que
procrean, hace que haya un problema serio. ¿Quién no se ha
encontrado alguna vez un gato herido por la calle? Sería
conveniente intentar hacer algo al respecto. Yo estaría
dispuesto a colaborar en la esterilización de los animales
callejeros, que sería algo muy interesante porque se
eliminaría el problema poco a poco ya que los gatos dejarían
de reproducirse.
P.- Recuerdo que en Málaga hubo, hace muchos años, una plaga
tremenda de perros y gatos callejeros y se utilizó un método
drástico para su eliminación mediante personas armadas.
R.- Eso, con la Ley de Protección animal ya no se puede
hacer. Es verdad que yo he visto un caso especial de
callejeros como es el de Roma, donde los gatos forman parte
del paisaje de la ciudad y han sabido sacarle ventaja al
asunto. Hay zonas donde los gatos están paseando
tranquilamente y son objeto de las cámaras de los turistas.
Son gatos castrados y esterilizados, aunque existe una parte
de ellos que están vastectomizados de manera que siguen
montando a gatas en celo pero no las dejan preñadas, aunque
con ello las gatas ya pierden el celo y no buscan otros
gatos. Esto disminuye la población gatuna. Si se hiciera
algo similar aquí, en cuatro o cinco años casi no existirían
los gatos callejeros.
P.- Estamos en verano, y más concretamente en cambio de mes
con inicio de vacaciones. Vemos todos los años las campañas
contra el abandono de mascotas. ¿Se dan casos en Ceuta?
R.- Creo que no, pero habría que preguntar en el servicio de
recogida de animales del Ayuntamiento y a la Protectora de
Ceuta. Es cierto que a nivel nacional hay un repunte en
estas fechas, pero desconozco los datos sobre esta ciudad.
Imagino que sí, que pueda haber gente tan cruel como para
hacer algo que la mascota nunca haría, abandonarlo. Pero los
animales están censados y tienen su microchip, por lo que
aprovecho para decir que están controlados y podemos saber
quién es el propietario que estaría cometiendo la
ilegalidad. Animo a todo el mundo a que pregunte si admiten
animales en el hotel de sus vacaciones y si no lo hacen,
pueden dejarlo en una residencia de mascotas, que en Ceuta
las hay bastante buenas.
P.- ¿Alguna anécdota?
R.- Principalmente las conversaciones con los propietarios,
que me cuentan las relaciones que se establecen entre el
animal y la familia, sobre todo con los niños. Un día llegó
una señora y me dijo que su perro entiende la televisión,
que hay programas que le gustan y otros que no. Anécdotas
hay muchísimas. Perros que han venido muy enfermos y han
entrado gruñendo y que ahora se cruzan de acera para
saludarme. Es una profesión apasionante. Me encanta.
P.- ¿Cómo le vino la vocación?
R.- Desde que tenía seis años ya decía que quería ser
veterinario. Ahora tengo cuarenta y uno y aquí estoy. Es muy
interesante poder investigar, saber qúe les pasa,
diagnosticar…
P.- Eso, ¿cómo adivina una dolencia en un animal?
R.- Pues es un poco como los pediatras con los niños
pequeños. Muchas veces se nos compara en este sentido.
Recientemente asistí a un curso, junto a otro veterinario
que trabaja conmigo, Marcos Ríos, en Córdoba, sobre
anestesiología, y parte de la conferencia la impartían
pediatras. Los aparatos de anestesia son muy parecidos y el
tamaño de los pacientes también. Nos decían que sus
pacientes oscilan entre uno y cien kilos, igual que los
veterinarios. Alguien puede decir que niños de cien kilos
sea exagerado, pero se dan casos, raros y escasos pero se
dan. Hacemos trabajo de investigación y colaboración con los
propietarios. Las pruebas diagnósticas también ayudan y,
además, contactamos con universidades en casos de duda
intercambiando correos electrónicos, mandando las
radiografías y los resultados analíticos.
P.- ¿Le han mordido alguna vez?
R.- Alguna no, muchas. Siempre estoy curándome, aunque
últimamente llevo una rachita bastante buena. Son gajes del
oficio. Es curioso, pero el perro que muerde al veterinario
suele ser aquel cuyo dueño dijo que no mordía. Cuando entra
un perro por la puerta y el dueño avisa que muerde, no es
problema porque se le pone el bozal y ya está. Luego está el
que es muy bueno y es verdad que no muerde nunca, pero
también aquel cuyo dueño dice que no me preocupe porque no
muerde, y a la primera de cambio se revuelve y pega el
bocado. A pesar de todo, la experiencia te va enseñando la
actitud de los animales y el manejo que hay que tener con
cada uno.
P.- Vamos, que tiene que actuar con psicología animal.
R.- Bueno, psicología y psiquiatría, un poco de etología,
ciencia del comportamiento. Tenemos que deducir por el
comportamiento del perro si le duele o no, y hasta qué punto
pueden ser peligrosos. Con los gatos sí que lo tenemos
complicado, pero también tenemos nuestros métodos de
control. No todos los gatos son malos, aunque hay de todo.
P.- Tengo una curiosidad. ¿Por qué algunos perros tienen la
costumbre de morder y coger con la boca la muñeca de sus
dueños?
R.- Los perros muerden por distintos motivos. La boca es
como una mano para ellos, no solamente sirve para comer,
sino que la utilizan como sistema de comunicación. Si te
tira del pantalón es porque quiere llevarte a algún sitio, o
si te muerde es como si se tratara de un juego. Claro está
que todo depende de la presión que ejerza con la mandíbula.
Si es poca, se trata de juego. Pero si lo hace con las
orejas hacia atrás, las pupilas dilatadas, el pelo erizado o
la cola en alto, se trata de una agresión y hay que tener
cuidado.
P.- ¿Hay laboratorios específicos que fabriquen medicinas
para animales?
R.- Sí, los hay, y también medicamentos especialmente para
ellos, y de todo tipo. Ya tenemos acceso a analgésicos,
antibióticos, antiinflamatorios, gases anestésicos que se
volatilizan, adrenalina, atropina… Y luego, es muy
importante el uso de los analgésicos. Los veterinarios
clásicamente es un tema que hemos olvidado, pero es muy a
destacar el uso de estos medicamentos. Cuando se opera a un
animal y se pasa a la sala de recuperación, lo mejor es que
no sienta dolor, que estén callados y tranquilos. Aquí
ponemos la analgesia antes de causar el dolor cuando
operamos, para que cuando acabe y se recupere pueda volver a
casa andando en condiciones óptimas.
P.- La mejor dieta para mascotas ¿es la del pienso?
R.- Sí, yo trabajo con una marca con la que estoy muy
satisfecho y tiene pienso para cada tipo de mascota sana.
Incluso, también lo hay para ciertas enfermedades como
diabéticos, artrosis, problemas cardiacos, problemas
renales…
|