Uno de los asuntos que más preocupa en el seno de la AD
Ceuta es encontrar recambio en el centro del campo para el
grancanario Alberto, cuya desvinculación del conjunto
caballa dejó vacante la posición de pivote defensivo. Y es
que, una vez cerradas las ocho primeras incorporaciones al
vestuario blanco, falta, como mínimo, un jugador que pueda
aportar equilibrio y hacer pareja con De Lerma o Aitor, los
dos medios creativos con que cuenta el equipo a día de hoy.
De ese modo, y con el objetivo de reforzar la medular con un
jugador con experiencia, llegado para ocupar una de las dos
fichas senior que restan, toma fuerza la opción de Juan
Carlos Gallardo, precisamente el compañero de Aitor en el
doble pivote del Atlético Ciudad de Lorquí. Futbolista
nacido en Jerez de la Frontera hace 26 años, que mide 188
centímetros y pesa 76 kilos, y que con anterioridad militó
en el Xerez CD y la UD Gramanet.
Un jugador del que ya se habló en su día, cuando la entidad
negociaba el regreso de Aitor a la disciplina caballa, con
el que Juan Carlos no sólo compartió vestuario en el
Atlético Ciudad, sino que también tiene en Raúl Valencia a
su representante. Así, y desde el fichaje del catalán por el
Ceuta, Raúl Valencia no volvió a tratar el ‘asunto Juan
Carlos’ con nadie de la entidad ceutí. Hasta comienzos de
semana, cuando Raúl Valencia entabló contactos con el
técnico jerezano, Carlos Orúe, que le reconoció que su
representado podría responder al perfil de jugador que
estaban buscando. Por lo que ahora será la junta directiva y
la secretaría técnica los que estudien la opción de firmar
al jerezano, que se encuentra entrenando con el Arcos, de
Primera Andaluza, para no perder la forma física.
Sobre la posibilidad de recalar en el Ceuta Juan Carlos
sostiene que “es uno de esos sitios apetecibles”, tanto por
el tema deportivo, al entender que “se aspira a lo máximo”,
como en lo económico, ya que “no hay problemas de cobro”. A
lo que se suma la posibilidad de reencontrarse con Aitor, lo
que se convierte en “un aliciente más”. Ya que “hemos jugado
todo el año juntos”, algo que llevan adelantado.
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