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Tras su publicación en el Boletín Oficial de las Comunidades
Europeas, el pasado día 16, la Ciudad Autónoma dio ayer
también publicidad, en el boletín oficial local, al concurso
para la licitación del Urban de las Caracolas. Este
proyecto, cuyas obras se prevé pueden comenzar en octubre,
supondrá la urbanización de 2,2 hectáreas de las 74,6 que
contempla el Plan Especial del Príncipe, con
infraestructuras básicas, nuevos viales, superficie para 75
viviendas y dos plazas, una de las cuales queda para una
segunda fase.
El ambicioso Plan de Urbanización emprendido por la Ciudad
Autónoma en el Príncipe, que abarca una superficie de 74,64
hectáreas, ha experimentado un nuevo avance con la
licitación pública del plan Urban diseñado para la zona de
las viviendas provisionales conocidas como ‘caracolas’, que
supondrá la reforma completa de 2,2 hectáreas situadas al
suroeste de la barriada. Este nuevo espacio de actuación se
suma a las 3 hectáreas que se encuentran actualmente en
proceso de remodelación en el Sector Norte y a las casi 2
que forman parte del proyecto de reforma interior de la zona
Centro.
Los contratistas interesados en la realización de esta obra,
que tiene un presupuesto base de licitación de 4.591.582,39
euros y un plazo de ejecución de diez meses, pueden
presentar sus ofertas hasta el próximo 7 de septiembre. La
apertura de las plicas tendrá lugar en el plazo máximo de un
mes a contar desde ese día, con lo que se prevé que la obra
pueda comenzar a partir de octubre.
Las obras se corresponden en concreto a la primera fase de
este proyecto, redactado por el ingeniero Desiderio Morga y
que incluye la mayoría de las actuaciones previstas, con la
única excepción de la construcción de una nueva plaza en el
entorno de la mezquita Al Humma.
De este modo, se ha previsto la construcción de nuevos
viales rodados y peatonales con “numerosos aparcamientos” en
superficie que permitirán el servicio del transporte público
y resto de servicios urbanos, y la conexión peatonal en el
conjunto de la actuación. Dada la “difícil topografía” de la
zona, como advierte el autor del proyecto, en su diseño se
ha tenido presente “la necesidad de procurar una adecuada
accesibilidad arquitectónica y urbanística en todos y cada
uno de los caminos y lugares previstos, intentando cubrir el
máximo sector de discapacidades de la deambulación”. A los
viales se unirá la construcción de dos nuevas rotondas con
sus correspondientes paradas de autobús, una de las cuales
conectará con la calle San Daniel y otra lo hará en un
futuro con la zona de Arcos Quebrados a través de un nuevo
vial previsto también en el Plan de Urbanización del
Príncipe.
Por otra parte, el proyecto contempla la adecuación de
parcelas para suelo residencial y comercial, donde se
calcula que podrá construirse una promoción de unas setenta
y cinco viviendas, dotadas a su vez, de aparcamientos para
los residentes. Según consta en la Memoria del proyecto,
este suelo residencial ocupará una superficie de 2.150
metros cuadrados, y el uso comercial se prevé en los bajos
del inmueble que se construya. Esta medida se califica por
parte del proyectista como el inicio del ‘esponjamiento’ de
la edificación, objetivo del Plan Especial del Príncipe.
Aunque en sus dos fases, se prevé asimismo la creación de
dos plazas públicas, que posibilitaran también la ejecución
de aparcamientos subterráneos, “numerosas zonas verdes, así
como zonas de esparcimiento y equipamientos”, una de ellas,
la de mayor tamaño, de unos 3.500 metros cuadrados y que
ocupará el terreno situado frente a la citada mezquita, se
deja para una segunda fase pues, según explicó Morga, dado
que todo el terrreno no pertenece a la Ciudad Autónoma, su
ejecución requerirá de algunas expropiaciones. La plaza que
se incluye en esta primera fase es la vinculada al espacio
residencial.
En cuanto a las instalaciones subterráneas, se ejecutarán
nuevas infraestructuras urbanas “adaptándolas a las nuevas
necesidades y se conexionarán con las generales de la ciudad
permitiendo eliminar los vertidos de aguas negras
incontrolados e iniciando una red de saneamiento
separativa”. La red de saneamiento se dejará lista para su
conexión con la EDAR.
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Los vecinos de las casas prefabricadas, a Loma Colmenar
La actuación de las Caracolas se
llevará a cabo de forma coordinada con la entrega, por parte
de Emvicesa, de las 225 nuevas Viviendas de Protección
Oficial (VPO) de Loma Colmenar, en las que serán realojadas
las cerca de 60 familias que habitan las casas
prefabricadas. Según las previsiones de la sociedad pública,
los pisos de Loma Colmenar, ubicados junto al nuevo hospital
y cuya construcción está a punto de finalizar, podrán ser
entregados hacia el mes de septiembre. Por su parte, en el
solar que quedará libre tras la ejecución del proyecto Urban
podrá levantarse una nueva promoción de vivienda protegida
que, a falta de la realización del correspondiente proyecto,
sería para unas 75.
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urbanismo
