Vacunar a los chicos contra el neumococo evitaría la
neumonía, complicación más frecuente de la gripe A y la
estacional, afirmó un grupo de profesionales que realizó un
estudio en dos hospitales pediátricos porteños
“La complicación más frecuente de la gripe, tanto en la A
como en la estacional, es la neumonía y el germen que más
produce la enfermedad es el neumococo”, dijo Eduardo López,
presidente de la Sociedad Argentina de Infectología
Pediátrica (SAIP).
Un estudio realizado en 2005 en los hospitales pediátricos
Ricardo Gutiérrez y Garrahan mostró que entre el 5 y el 8%
de las internaciones de menores de 2 años con afecciones
respiratorias fueron por gripe y de ellos, el 67% tuvo
complicaciones, en su mayoría por una neumonía probablemente
bacteriana por neumococo.
Enrique Casanueva, jefe de la sección Infectología Infantil
del Hospital Universitario Austral, dijo que “existe una
clara relación entre el neumococo y la influenza. Durante la
famosa epidemia de gripe de 18, conocida como gripe
española, muchísimas personas morían de neumonía neumocócica”.
En ese sentido, consideró que “el problema de la gripe es la
neumonía que se puede producir en cualquier chico, pero es
potencialmente más grave en aquellos que tienen factores de
riesgo tales como el asma, diabetes, afecciones renales y
cardiopatías, y en el caso de los bebés prematuros”.
“En esos grupos las complicaciones pueden ser más severas o
más invasivas y además, el neumococo es la principal causa
de meningitis, junto con el meningococo”, dijo el médico.
Se sabe que la transmisibilidad de la gripe A es mucho mayor
que la de la estacional, aunque su mortalidad probablemente
sea menor.
“Lo que nos preocupa es que el 70 por ciento de los
afectados por gripe A son menores de 18 años, y el 30 por
ciento de ellos son niños, por debajo de los cuatro años”,
dijo López.
Por esta razón, además de la vacuna contra la gripe
estacional, los infectólogos recomiendan que los menores de
2 años, e inclusive los de 4, y aquellos que pertenecen a
grupos de riesgo, reciban la vacuna contra el neumococo. Esa
vacuna, según los datos de Argentina, “previene el 67,8 por
ciento de las neumonías en menores de 2 años, el 50 por
ciento de las meningitis y el 70 por ciento de las
enfermedades bacteriemias”, informó López.
La gripe A es una infección por un nuevo virus de influenza
que hasta el momento, produjo más de 800 muertes, según la
Organización Mundial de la Salud (OMS).
Ese virus se transmite de persona a persona, en forma muy
similar a como se propagan los virus de la influenza o la
gripe estacional y los más afectados son los menores de 18
años.
Por su parte, la gripe estacional causa cada año entre 3 y 5
millones de casos graves en el mundo y mata a entre 250.000
y 500.000 personas. Para esta patología se elabora todos los
años una vacuna para prevenir ese tipo de influenza.
Los síntomas de ambos tipos de gripe son fiebre, tos, dolor
de garganta, moqueo o secreción nasal, dolores en el cuerpo,
dolor de cabeza, escalofríos y fatiga.
Los virus de la influenza pueden sobrevivir en la superficie
del ambiente e infectar a personas entre 2 y 8 horas después
de haberse depositado en un lugar. Esos virus son destruidos
por el calor, entre 75 y 100 grados, y por germicidas
químicos como el cloro, detergente, jabón, antisépticos a
base de yodo y alcohol.
En tanto, las enfermedades neumocócicas son infecciones
causadas por una bacteria y se manifiestan con cuadros de
meningitis, neumonía y otitis media.
|