Activado todo el dispositivo de emergencias por encontrarse
la ciudad en ‘alerta roja’ por riesgo extremo de incendio
forestal, el fuego iniciado en la zona próxima a la nueva
hípica, en la carretera de acceso al Jaral, se pudo
controlar casi de inmediato aunque no se haya podido salvar
de la quema unos 400 metros cuadrados de bosque con algún
que otro eucalipto.
Primer incendio forestal, aunque de escasa relevancia,
producido este verano en Ceuta. En una jornada en que la
ciudad se encontraba por tercer día consecutivo en alerta
roja por riesgo extremo de fuego, los bomberos tuvieron que
acudir prestos a sofocar las llamas que corrían por una de
las laderas de la subida al Jaral, muy próximas al nuevo
centro hípico y al propio CETI. Los acontecimientos se
sucedieron en torno a las 12’30 horas del mediodía cuando se
dio alerta al Servicio de Extinción de Incendios de la
Ciudad Autónoma. De inmediato, Protección Civil y el propio
Seprona de la Guardia Civil se activaban junto con los
profesionales del Parque de Bomberos de la Ciudad y se
mantenía la alerta para, en caso de necesidad, elevar el
nivel de las medidas a adoptar. No hizo falta. La premura y
la capacidad de reacción de los bomberos sobró para
extinguir y enfriar posteriormente toda la zona en
prevención de un resurgimiento del fuego posterior.
La causa más probable que se mantenía como hipótesis, dadas
las pruebas existentes y el foco del incendio, era que
podría haberse debido a los resocldos de los pequeños fuegos
elaborados para cocinar que realizan los inmigrantes que
residen fuera del CETI, en el monte a la intemperie.
El viento de poniente, la escasa humedad relativa y las
altas temperaturas son motivo de alto riesgo de incendios
forestales. Circunstancias en las que se encuentra Ceuta.
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