El inicio de la Operación Paso del
Estrecho fue el detonante de una subida indiscriminada de
las tarifas dirigidas a todos aquellos usuarios no
residentes en la Ciudad Autónoma de Ceuta dificultando aún
más la llegada de visitantes a una localidad que reúne los
atractivos naturales, culturales, patrimoniales y
comerciales así como, las infraestructuras necesarias para
acoger dignamente al principal elemento del sector
turístico.
Muchas reflexiones han sido recogidas en los medios de
comunicación locales en las últimas semanas expresadas por
diferentes agentes sociales en relación a las tarifas
abusivas que establecen libremente las navieras que operan
en la línea Ceuta- Algeciras incluyendo, la adjudicataria de
la Línea de Interés Público. Opiniones totalmente
respetables que ofrecen las diferentes posiciones existentes
a una problemática que afecta gravemente a la expansión de
nuestra Ciudad.
No obstante, sería muy recomendable recordar a quienes
plantean el establecimiento de embarcaciones lentas al
objeto de reducir las tarifas existentes en esta línea
sustituyendo los buques rápidos, que esto supondría un
retroceso en el bienestar de todos los ceutíes,
retrotrayéndonos a un pasado en el que las travesías de los
17 kilómetros que nos separan de Algeciras se demoraban por
encima de la hora y media. Actualizando los horarios a las
circunstancias actuales deberíamos hablar de una navegación
que superaría las dos horas de travesía que deberíamos
añadir a nuestros desplazamientos.
Sin ninguna duda, existen otras posibilidades como por
ejemplo, la que solicita incluir, al igual que en el resto
de líneas de interés público como las de Málaga-Melilla y
Almería-Melilla, la inclusión en el pliego de condiciones
del contrato administrativo a firmar entre la compañía
adjudicataria y la Administración General del Estado, de
tarifas máximas que evitarían subidas espectaculares como
las producidas en el último mes. Por tanto, correspondería
al Gobierno de la nación a través, del Ministerio de Fomento
establecer condiciones ventajosas para nuestra Ciudad
facilitando con ello, la llegada de visitantes.
En definitiva, cualquier planteamiento que asegurase precios
ajustados al servicio recibido sin malograr lo ya conseguido
sería bien recibido por una ciudadanía necesitada del
compromiso del Gobierno de España, sustentado por el partido
socialista aunque, garantizando la prestación de un servicio
donde, embarcaciones rápidas y embarcaciones lentas gozaran
de la calidad exigida así como, una clara diferenciación de
tarifas.
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