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Mohamed Hamed Sel-lam, apodado ‘El Vasco’ está fuera de
peligro en la 2º planta. No se teme por su vida, aunque
lleva 24 heridas por arma de fuego impactadas en sus
piernas. Ayer, de madrugada fue intervenido quirúrgicamente
para cortar las múltiples hemorragias que padecía, pero el
parte médico oficial culmina diciendo que se encuentra grave
aunque el paciente está fuera de peligro. En menos de dos
meses a Mohamed Hamed le han tiroteado en dos ocasiones.
Expertos investigadores consultados aseguran que el suceso
de la noche del viernes “es sólo un aviso. No quisieron
matarlo”.
El barrio del Príncipe volvió a ser escenario de un suceso
violento con armas de fuego de por medio.
A las 23’00 horas de la noche del viernes, el conocido
carnicero -’el Vasco’- volvía en su coche junto con otro de
visitar a una hermana enferma. A la altura de su casa, a
escasos veinte metros, antes de tomar la curva para
adentrarse en el vial que lleva a su domicilio y frente a la
mezquita (casi en el mismo sitio donde fue tiroteado en el
pasado mes de mayo), un individuo pertrechado con
pasamontaña -según testigos presenciales- y, al parecer sólo
uno, se dirigió a la parte del coche en la que se encontraba
su objetivo, abrió la puerta y le descargó el arma en sus
piernas.
En el hospital le han tratado 24 impactos de bala en las
piernas. En cualquier caso la policía quiere cerciorarse de
si el pistolero empleó una o dos armas porque el número de
casquillos hallados (18) no pueden ser percutidos de un modo
seguido con una sóla arma. Es posible que halla podido poner
un nuevo cargador en la misma pistola que utilizaba, o el
pistolero disparaba a dos manos. Y todo esto porque, según
los testigos, sólo era un irreconocible encapuchado el que
descerrajó los tiros contra el ‘Vasco’. Aunque a la hora de
no descartar nada, la Policía Judicial esperará a Balística
para que determine las trayectorias y si los casquillos
fueron percutidos con el mismo arma o con distintas. De ese
modo se puede valorar, por la trayectoria, si se disparó a
dos manos, si fueron dos individuos disparando, o si el
pistolero vació un cargador e introdujo seguidamente otro.
Efectivamente, en un trabajo minucioso de la Policía
Científica durante las primeras horas de la madrugada del
sábado se hallaron en el lugar de los hechos 18 casquillos
diseminados en las cercanías de donde con seguridad se ubicó
el pistolero. Sólo 18 casquillos, lo que difiere del hecho
de que la víctima haya sido impactada 24 veces. La teoría
más verósimil es que alguna bala haya entrado y salido por
una pierna y se haya alojado finalmente en otra.
Tanto los casquillos como el vehículo forman parte de las
pruebas que ahora organiza la Policía Judicial para su
investigación.
‘El Vasco’ no estaba sólo en el coche. A su compañero
tuvieron que asistirle igualmente en el hospital porque
entró en un fuerte estado de shock aunque sin heridas de
balas. A la víctima lo trasladaron inmediatamente en un
coche particular de algún vecino que pasó por el lugar. No
se esperó a la ambulancia.
Sobre las 00’00 horas los alrededores de Urgencias se
encontraban plagados de amistades y familiares del carnicero
que sufrió por segunda vez en dos meses dos tiroteos. La
Policía determina ahora el móvil de este nuevo atentado.
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“No quisieron matarlo, sólo advertirle”, dicen expertos
investigadores
“No quisieron matarlo”. Esta es la
primera conclusión a la que llegan los profesionales de la
investigación. Aún cuando fue muy elevado el número de
impactos de bala que la víctima recibió, el hecho de
tirotearlo en las piernas significa el hecho evidente de dar
un “severo mensaje de aviso”, dicen los entendidos. Está
claro que es un modo de decirle que “o haces lo que decimos
o sabes que te podemos matar cuando queramos”, aseguran
investigadores expertos en el modo de actuar de
organizaciones seudo mafiosas. Lo que sí muestra el hecho
acaecido el pasado viernes en el Príncipe Alfonso es que el
pistolero, si fue uno sólo, sabía perfectamente hacer el
trabajo mostrando una cierta precisión a la hora de efectuar
los disparos cuando la víctima quedó a su merced intentando
refugiarse en el asiento trasero del vehículo
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NUEVO TIROTEO EN EL PRÍNCIPE
